* Es un error depender absolutamente de una persona, te acabará fallando (y la otra necesitará de una disposición muy mayor para mantener la relación):
* No hay que pensar en alguien como "disponible", no es un infermero. Hay que buscar más el equilibrio en obligaciones.
* También he llegado a la conclusión que la gente decaída y con problemas se tiende a rechazarla ¡Vivamos pues todos el botellón de la vida! Yo creo que tiendo más a interesarme por ellas, la alegría en sí me parece... frívola.
* Yo no tengo y he tenido a muy poca gente que realmente nos preocupásemos el uno del otro, sigo a la búsqueda de mis personas y mi sitio. Como dice
atenea269 también ponemos demasiadas barreras, impedimentos a la hora de profundizar en algo, prejuicios, vemos defectos absurdos, diferencias con los demás que nos "superan" y nos infravaloramos, etc...