Yo te diría que fueras y te enfrentaras a todos tus miedos. Quedarse en casa sólo significaría frustración, y darle vueltas y más vueltas a lo que podría pasar o no, te sumergirías todavía más en tu problema. Tendemos a evadir siempre todas las situaciones que nos provocan ansiedad, yo también lo he hecho demasiadas veces, y para lo único que me ha servido ha sido para comerme el tarro todavía más pensando en lo bicho raro que soy y maldiciéndome por no ser 'normal' y poder disfrutar de una conversación en vez de padecerla, divertirme saliendo por ahí y conociendo gente y no huír de todo lo que signifique relacionarse con los demás.
Y joder, al final todo se reduce a un problema tan simple como '¿Y qué podrían pensar los demás de mí?' Te paras a pensarlo y llegas a la conclusión de que importa lo mismo que un pepinillo en salmuera con traje de faralaes. Que te aceptan, perfecto, que piensan que eres más rara que un hámster fucsia, pues ellos se lo pierden, está claro que no se puede agradar a todo el mundo. La teoría es muy fácil, la práctica cuesta un huevo, pero mentalizándote un poco descubres que tampoco es taaan complicado.
Y puf, si te contara la de crisis de ansiedad histérico-suicidas que he tenido yo en público...delante de amigos, o de suegros, o de gente anónima que pasaba por la calle, o del papa en almíbar. En muchos casos, delante de gente a la que he tenido que mirar a la jeta al día siguiente, y no por eso se ha derrumbado el mundo ni ha venido una plaga de hormigas mutantes del espacio a sodomizar a la humanidad. Pensarán que tienes tus rarezas, que eres una antisocial, pensarán miles de cosas, pues mira, mejor, así ya lo saben y no hay que esforzarse en seguir actuando y aparentando que todo es chachipiruli y aquí no pasa nada de nada. Y te sorprenderá que a pesar de ese episodio horrible que te dio tantísima vergüenza y por el que te querías morir en realidad para ellos no ha cambiado nada, te seguirán tratando de la misma manera o como mucho se preocuparán de preguntarte si te pasa algo.
Sácale la lengua al miedo y apúntate una pequeña victoria, aunque sea una victoria a medias. Muchos logros chiquititos acaban por hacer uno grande de verdad, pero si dejas que tu mente siempre gane la partida al final acabarás siendo su esclava, y podrá manipularte cuando quiera.
Y menuda parrafada de presentación que me acabo de marcar O_ó
Me presento, soy la Srta.Lechuza, y esta biblia es mi primer mensaje en vuestros foros, siento de verdad la diarrea verbal, ya se sabe, la emoción del principiante...un afectuoso aleteo letal para todos
