Solia escribir cuentos de temática gay en un blog que llego a tener mucho éxito. Es con esa atención mediática que el escribir dejo de ser divertido y entre en la disyuntiva de complacer a mi público con más de lo mismo o seguir mi impulso creativo e intentar cosas nuevas.
En ese proceso experimental fui perdiendo seguidores, y eso me bajoneo a tal punto que abandone mi faceta de aspirante a escritor.
Para que esforzarme si no recibia ni un puto real por entretener a esos ingratos.
Como trabaje en distintas editoriales de ilustrador y diagramador. El año pasado me dio la locura de editar mis propias revistillas culturales. Y si bien avance el proyecto, de momento lo tengo en
stand by. Siento que aún debo mejorar mi redacción y técnica de ilustración antes que nada.