Hace algunos días atrás charle por el face con una "amiga" mía que conocí en la célula a donde asisto, hace tiempo que no lo hacia. Con ella logre tener unas buenas charlas, y hasta sentí buena química. Como dejo de asistir a la célula perdimos comunicación. Hace unos días logre que me respondiera en el face, después de una largo tiempo. La conversación no fue muy larga.
La cuestión es que le dije que quería serenarme y ya no cargar con el sentimiento adentro. Le dije que me gustaba y que no le había dicho porque no tuve el valor, y que ya no sentía nada por ella.
Costo que me respondiera, pero al fin respondió. Me dijo que ella también sintió algo lindo por mí, pero como no le dije nada, lo dejo así. Y le dije que si le hubiera dicho que fuese mi novia, aceptaría... Me dijo que sí, yo pensé: Mierda, cuantos amores he podido perder por mi timidez.
Y luego me puse pensar que esta enfermedad social que me hace aislarme de todo, es lo que me ha hecho perder mucho de mi tiempo, prácticamente lo mejor de mi vida.
Y luego me puse a pensar que aún estoy joven, apenas 22 años, y que si realmente pongo manos a la obra y empiezo a trabajar en cambiar mi carácter y actitud, podré cambiar.
¿Realmente quiero vivir solo? Esa pregunta se me vino a la mente, ¡sí¡, negarme a tener una familia, a vivir esa experiencia de ser padre, de amar a una mujer. Tal vez lo de ser una persona fría y desapegada a las emociones solo sea alguna especie de defensa de mi mente para no tener la responsabilidad de hacer una familia, por el miedo al rechazo(característica de mi enfermedad social).
Siempre miro las cosas buenas y malas de cada forma de vida, un hombre libre o un hombre con mujer, ya veremos que elijo al final. Bueno, eso también depende si la logro erradicar la enfermedad social que padezco.