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Iniciado por CuyMagico
Yo tengo serios problemas con ésto.
No se trata de desconocidos totales, sino de gente que te encuentras sí o sí, todos los días al hacer las cosas rutinarias, con algunas de las cuales tienes que tratar y saludar por narices.
No me gusta saludar, más que nada porque tengo una voz demasiado baja, apenas puedo mirar a los ojos y me da una ansiedad del copón (anticipación de la situación), el resultado es siempre el mismo: Digo un "hola" que más que un saludo es un reclamo para que el otro se de cuenta de que efectivamente estoy mal de la azotea.
A veces me hago el despistado, y no saludo, y poco a poco la gente va dejando de saludar también...Así hasta que prácticamente me quedo solo, habiendo hecho el ridículo por mi actitud de antipático, y ganándome una fama penosa entre los vecinos, con la consiguiente ansiedad de tener que volver al día siguiente, con una presión mayor.
Siempre es igual, al principio muy buena onda en el ambiente con la gente, pero yo mismo me encargo de ir cagándola.
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eso es lo que quería decir.
Aqui muchos han dicho que que mas dá como se salude, ellos lo hacen como les de la gana y punto. Pues ese es el problema, que no puedo saludar como me dé la gana, ya que me gustaria un hola NORMAL, sin ser seco pero tampoco llendome artificialmente al otro extremo.
Y es lo que dice cuymagico, al final quedó como un borde y eso me aumenta la ansiedad para la proxima vez y asi va creciendo la bola.
Creo que los que ya nos cuesta incluso saludar, somos los que ya hemos llegado a un nivel de degradación al que poco llegan.
