Hoy he dado un paso adelante. Me he reencontrado con los viejos amigos, y bueno, aunque en algunos momentos he estado un poco dubitativo, finalmente me los he comido con patatas.
Me siento muy bien después de recuperar el contacto con ellos, y sé que esto irá a mejor con el tiempo.
Además, me he dado cuenta de que estoy empezando a encontrar sentido a mi vida. Este año 2011 voy a intentar tener mi agenda apretada al máximo (de lo que yo quiero) para no tener que pensar. 2010 finaliza muy bien, con un muy buen balance.
No me importa si no tengo plan para Nochevieja, porque realmente Nochevieja no me importa demasiado. Lo importante es que le estoy empezando a encontrar sentido a mi vida. Y eso no tiene nada que ver con las juergas y las salidas nocturnas. Espero más de la vida, mucho más.
Hace dos días estaba de un bajón tremendo, pero después de la tempestad llega la calma (o en mi caso, debería decir al revés).
Porque la vida puede ser maravillosa.