Probablemente lo contrario a lo que soy ahora; seguro haría todas esas cosas que el miedo no me permite hacer. Principalmente tendría alguna veta artística, como la música por ejemplo.
Pues como soy ahora pero sin las contradicciones debidas al miedo a pasar a la acción en determinadas situaciones. Mi salud mental lo agradecería, desde luego, quizá sería hasta menos depresivo (aunque tampoco lo tengo claro). Mera especulación.