Las Putas Romanas (1 de 7)
JULIA LA MENOR
Apodada
Julila, fue hija de
Julia la Mayor, por tanto nieta del moralista emperador
Augusto. Tras casarse y salir de la sobreprotectora casa de su abuelo, se desbando en un sinnúmero de excesos; como hizo su progenitora, antes que fuera desterrada por libertina al igual que su hermano menor
Póstumo, con quien la intrigante Julila cometió incesto para consolidar una ambiciosa alianza, así fue hasta que aquel también fue exiliado por la misma razón. Julila correría igual suerte al ser enviada a la isla de Trimero cuando se descubrió su adulterio con un renombrado aristócrata, al mismo tiempo que su marido era ejecutado por rebelarse contra el Imperio y el poeta
Ovidio que, sirvió en su momento de alcahuete tanto a ella como su madre, era enviado al destierro. Mientras, su amante partía a un exilio voluntario por enemistarse con el divino Augusto, en su encierro nuestra heroína daría a luz al hijo de ambos, pero el implacable emperador ordenaría exponerlo a la intemperie para que muriese, además de derruir su casa en Roma por considerarla muy lujosa para un gobierno austero, como presumía ser el suyo. Luego de veinte penosos años de cautiverio, Julila por fin moriría coincidentemente durante el reinado de su padrastro
Tiberio.
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