Se termina este año y ya se pueden sacar qué rato conclusiones acerca del mismo, así que vamos al grano... ¿Cómo te fue este año?
En lo personal, no fue un año fantástico para mí pero sí ha sido el mejor (o el menos malo) desde mi niñez. Lo describiré por mes, pero para no leer tanto se puede pasar directamente al resumen xD...
Enero: Malo, así que el 2013 empezó con el pie izquierdo: Peleas y diferencias con familiares (vaya novedad), estuve en el campo de unos tíos porque mis peleas con mi padre se hicieron insostenibles (como cada vez que peleamos). Pensé que en el campo la cosa cambiaría pero el mal carácter de mi tía y sus sermones acabaron por alejarme y me fui sin siquiera avisar más allá de dejar una nota por escrito (no había nadie ese día porque mis tíos salieron)... Cuando llegué a casa, discutir fuertemente con mi padre por cosas que me reservo comentarlas públicamente y no nos hablamos hasta principios de Marzo. Lo bueno es que me supe defender bastante bien del impresentable y terminé por descubrir que mis familiares son todos cortados por la misma tijera (excepto un tío que es como yo).
Febrero: Empecé irritable y no se me podía hablar hasta que volví con los antidepresivos. Este mes fue bastante mejor ya que por primera vez pude quedar/juntarme con personas que sólo conocía por Internet sin beber alcohol de antemano para desinhibirme (eso sí, son personas que también tienen algo de fobia social, incluso postean/posteaban aquí). Por cierto, empecé a dejar de beber paulatinamente este 2013. También empecé a trotar e hice algo de gimnasia, y seguiría así hasta el día de hoy (entre 2009 y 2012 el sedentarismo era muy predominante). También empecé tratamiento psicológico.
Marzo: Con altibajos. Bien porque pude seguir juntándome con ya mencionadas personas sin beber de antemano y me enfoqué en actividad física. Lo malo fue que volví a beber y me di cuenta que mi adicción era tan incontrolable y grave como a fines del 2012, aunque como no tenía dinero bebía menos. Seguí con el tratamiento psicológico aunque aún no me daban medicamentos (estaba en un proceso de análisis), pero sí me automedicaba.
Abril: Lo mismo, sólo que bebí sólo 2 días y se daría inicio a una de mi mayores rachas de abstinencia etílica. Seguirían algunas juntas y la actividad física. Bueno en general, pero me dio por beber agua compulsivamente debido al síndrome de abstinencia alcohólica (hasta a los 8 litros diarios llegué) y levemente trotaba menos. Aquí ya me dieron medicamentos en el tratamiento contra la fobia social, la depresión, el insomnio y el alcoholismo.
Mayo: Regular. Tuve menos acceso a Internet debido a que mi ordenador tuvo problemas y fui estando flojo con la actividad física, tampoco podía encontrar trabajo. También tuve síndrome de abstinencia donde me dio por consumir una droga alternativa al alcohol (sin el efecto deseado) y seguí bebiendo agua compulsivamente (aunque cada vez menos). Lo que equilibra el balance fue que seguí quedando con personas como yo y que no bebí ningún día hasta el 31 del mes, o sea no alcancé a completar Mayo sin beber. Seguí con el tratamiento.
Junio: Progresivo. Si bien las juntas fueron desapareciendo, este mes sólo bebí el primer día pero se daría inicio a mi mayor racha sin beber, y eso tendría cambios muy positivos. Empecé a añadir el ciclismo a mis actividades físicas y volví a trotar con regularidad. Eso sí, seguía sin poder encontrar trabajo y dejé de salir de casa si no era para correr o andar en bicicleta; de todas formas, el tiempo no ayudaba mucho puesto que era invierno y hacía mucho frío. Seguí con el tratamiento.
Julio: Lo mismo que Junio, con la diferencia que aquí fue el mes más casero (ninguna salida con alguna persona) y cambié el trote por la máquina elíptica. A estas alturas, iba en camino a que en prácticamente todos mis 24 años de edad fuese un ni-ni (no trabajaba desde fines de Agosto 2012, cuando estaba independizado en la capital de mi país).
Agosto: Ni siquiera bebí en mi cumpleaños y eso fue un gran paso, también seguí con el tratamiento y con la actividad física, por lo que tanto física como psicológicamente estaba bastante mejor. Me inscribí en un curso pero no me llamaban al plazo esperado, así que seguí buscando trabajo (poco antes de mi cumpleaños fui a dejar CV a un lugar sin éxito). Buen mes, además ya cada vez me iba desinhibiendo más para conversar online debido a que ya no bebía (antes sin beber era incapaz pero este año paulatinamente mejoré en ese sentido).
Septiembre: Bien pero difícil. Al fin encontré trabajo, era estresante y explotador el horario eso sí y me quitó tiempo para la actividad física. También volví a beber aunque aguanté más de 3 meses sin hacerlo (casi 4). Eso sí, en una ocasión al menos me deshice de lo que había comprado para beber, pero fue porque mi padre me descubrió y me dijo que no bebiera si quería seguir progresando; el mérito mío está en que me deshice de la botella (se la entregué para que la botase sin que me la pidiera) en vez de guardarla para otro día. Duré 119 días sin beber nada de alcohol. También fui a beber con un amigo de la infancia a un bar, luego de 2 meses y casi 3 semanas sin salir con nadie. Lo otro, me llamaron del curso al que había postulado y que había dado por perdido, o sea genial.
Octubre: Altibajos. Empezaron los problemas emocionales derivados del trabajo, el que terminé desechándolo por conflictos con quienes son dueños del negocio. Bebí 3 veces, pero ya lo empecé a considerar innecesario y sin ser la gran maravilla con respecto al pasado, supongo que porque ya me desinhibía bastante bien sin necesidad de tomar alcohol. Empecé el curso (quedé seleccionado) apenas dejé el trabajo, al principio fue ansiedad e incluso bloqueos ya que soy el único hombre en él.
Noviembre: Probablemente, mi mejor mes del año. En el curso me fui adaptando cada vez de mejor manera, a pesar de seguir con la ansiedad pero cada vez menos. Volvió la actividad física y el tratamiento (con lo del trabajo se habían quedado sin cumplirse), así que genial.
Diciembre: Muy bueno. No tan bueno como Noviembre quizás pero sí las cosas siguen mejorando. Todavía queda una semana eso sí.
En resumen:
Un buen año, donde las cosas se han hecho bien y hay avances significativos. No considero tiempo perdido todo el tiempo que estuve de ni-ni ya que me sirvió para dedicarme al tratamiento, la actividad física y -al no tener dinero- dejar de beber. Me preocupo mucho más por mi salud, el curso me está ayudando a relacionarme con personas del sexo opuesto (me llevo mucho mejor con chicas que con los compañeros de mi mismo sexo que he tenido, con quienes siempre he tenido mis diferencias y conflictos por lo demás) y ahora estoy más delgado.
De todas formas queda mucho por mejorar, por lo que ya estoy pensando en el 2014 y tiene que ser bastante mejor. Todavía falta algo que haga olvidar todos los malos años (los anteriores al 2010 en su mayoría fueron desastrosamente nefastos).
Sería.