Estoy a tres años desde que se me declaro la depresión. No sé si la tenga hoy en día, de ser así no está en la misma intensidad, pero tampoco es que me sienta a gusto con lo que soy, con lo que siento y con lo que es mi entorno en general.
Recuerdo que solía pedir ayuda a los médicos, en este caso psiquiatras y neurólogos. Si, con la intención de que me recetarán medicamentos, de que unas pastillas fuesen a solucionar mi complejos físicos y otras molestias de mi angustia.
En rigor solo le redujeron ciertos síntomas. Recuerdo que esa vez me sentía demasiado víctima del mundo y de los demás. Tal vez porque no le veía salida a mi situación. Además recuerdo que solía preguntar a mis médicos porque me ocurría esto a mí, que hice mal. Solían responderme aunque no de forma satisfactoria...
Y ellos me decían que problemas siempre los tendrás, quedándome mudo y decepcionado de la vida.
¿Es que acaso problemas como estos siempre los tendremos en nuestra línea de frente? ¿o es que acaso la lluvia siempre existirá en el trayecto aunque en intensidad diferente?