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Pasajes
"Doon, la hija de Diane, nació el 3 de abril de 1945. Pasado el tiempo, Diane le contó a Naomi Rosenbloom que había prohibido a su madre y a su hermana que la acompañaran al hospital. No había querido que ninguno de sus íntimos presenciara su drama personal de miedo, sentido de culpa y expectación. A Diane le aterrorizaba estar sola, pero creía que debía estarlo si de veras quería experimentar algo: sólo así tendría sentido".
"Diane Arbus" Patricia Bosworth. Ed. Lumen, Memorias y Biografías. |
[Nota sobre cómo se conocieron Marvin Israel y Lisette Model]
* Se conocieron en 1979, en la casa de Model, para intercambiar opiniones sobre posibles diseños. Tras un silencio embarazoso, Model comentó: "Siempre le he temido, Marvin". Después de unos minutos, él respondió: "¡Qué ridiculez! He sido yo quien siempre le tuvo miedo a usted". Según palabras de Model, "nos llevamos muy bien" después de aquella confidencia. idem |
Matisse no sueña impunemente con "el arte del equilibrio, de la pureza, de la tranquilidad, sin un contenido inquietante o preocupante, que produzca el efecto en todo trabajador cerebral, de un calmante, algo análogo a un cómodo sillón para recuperarse de las fatigas físicas".
De aquí a ser considerado un gran burgués, aislado y reaccionario, no hay más que un paso y un malentendido más. Matisse se indigna por ejemplo con la afirmación de René Huygue, que le atribuye "una impasibilidad de ánimo exquisita y refinada". "¿Cómo puede hacerse arte sin pasión?" responde. "Sin pasión no hay arte. El artista se domina más o menos, según los casos, pero es la pasión lo que motiva su obra. ¿La angustia? No es peor para nosotros de lo que fue para los románticos. Es necesario dominarlo todo. Hay que mantener la calma; el arte no debe inquietar ni confundir -tiene que ser equilibrado, puro, sereno-." Y a Gaston Diehl le confiesa que ha decidido "guardarme los tormentos e inquietudes, para no expresar más que la belleza del mundo y la alegría de pintar". "Matisse" Gilles Néret. Taschen, 2006. Cambiando las palabras justas |
Cita:
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Poco a poco empecé a volver la espalda a mis padres. No es que empezara a quererlos menos, sino que el mundo del que procedían ya no me parecía un lugar tan atractivo para vivir[…]Muchos de esos cambios pueden atribuirse a la adolescencia[…]pero no todos[…]Otras fuerzas me estaban influyendo al mismo tiempo, y cada una de ellas contribuyó a empujarme hacia el camino que seguí más tarde. No era únicamente el dolor de tener que presenciar el derrumbe de su matrimonio, ni la frustración de estar atrapado en una pequeña ciudad de las afueras, ni tampoco el ambiente norteamericano de les últimos años cincuenta; pero si sumamos todo eso, tendremos de pronto un sólido argumento contra el materialismo, una condena del punto de vista ortodoxo de que el dinero era un bien más valioso que cualquier otro. Mis padres apreciaban el dinero, ¿y que habían sacado con eso?. Habían hecho grandes esfuerzos por conseguirlo, le tenían mucha fe y, sin embargo, por cada problema que les había resuelto, otro nuevo había surgido. El capitalismo estadounidense había creado uno de los momentos más prósperos de la historia humana. Había fabricado cantidades innumerables de coches, verduras congeladas y champús milagrosos, pero Eisenhower era presidente y el país entero se había convertido en un gigantesco anuncio televisivo, en una incesante arenga para comprar más, producir más, gastar más, bailar en torno al árbol del dólar hasta caerse muerto de puro frenesí al tratar de mantenerse a la altura de los demás.
Extracto de Asalto de mata por Paul Auster. |
"No creo en el próximo establecimiento de una receta surrealista. (...)Los procedimientos surrealistas reclaman mayor amplitud todavía. Cualquier medio es bueno para obtener de ciertas asociaciones la instantaneidad requerida. (...) Hasta se vuelve lícito denominar POEMA al resultado obtenido por la reunión lo más gratuita posible (conservando la sintaxis si se quiere) de títulos y fragmentos recortados de los periódicos."
"El surrealismo tal como lo concibo proclama lo bastante nuestro disconformismo absoluto para que se le pueda citar en el proceso al mundo real como testigo de descargo. (...) El surrealismo es el "rayo invisible" que nos permitirá un día triunfar sobre nuestros adversarios. "No tiembles, adefesio". Este verano las rosas son azules; la madera es vidrio, la tierra envuelta en su verdor me impresiona tan poco como un aparecido. La existencia está en otra parte." Manifiesto surrealista, André Bretón |
"Todo verdadero sentimiento es en realidad intraducible. Expresarlo es traicionarlo. Pero traducirlo es disimularlo. La expresión verdadera oculta lo que manifiesta. Opone el espíritu al vacío real de la naturaleza, y crea, como reacción, una especie de lleno en el pensamiento. O, si se prefiere, en relación con la manifestación-ilusión de la naturaleza, crea un vacío en el pensamiento. Todo sentimiento poderoso produce en nosotros la idea del vacío. Y el lenguaje claro que impide ese vacío impide asimismo la aparición de la poesía en el pensamiento. Por eso una imagen, una alegoría, una figura que ocultan lo que quisieran revelar significan más para el espíritu que las claridades de los análisis de la palabra.
Por eso la verdadera belleza nunca nos hiere directamente. El sol poniente es hermoso por todo lo que nos hace perder." |
milton
"Por qué camino podré huir de la cólera infinita y de la infinita desesperación? Por cualquiera que lo intente, iré a parar al infierno: el infierno soy yo mismo; y en el abismo más profundo existe dentro de mí un abismo más profundo, que, anchamente abierto, sin cesar amenaza devorarme; en comparación de este antro, el infierno en que sufro es parecido al cielo."
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El rostro de un candidato político en una valla publicitaria
Ahí está: No demasiadas resacas No demasiadas peleas con mujeres No demasiados neumáticos desinflados Nunca pensó en el suicidio No más de tres dolores de muelas Nunca se saltó una comida Nunca estuvo encarcelado Nunca estuvo enamorado 7 pares de zapatos un hijo en la universidad un coche que no tiene más que un año pólizas de seguros un césped muy verde cubos de basura con tapa hermética seguro que le eligen. -Bukowski |
La ciencia me repugna desde el momento en que se transforma en sistema especulativo y pierde su carácter de utilidad, que, aun siendo inútil, es, sin embargo, individual. Yo odio la crasa objetividad y la armonía, esta ciencia que halla que todo está en orden: continuad, muchachos, humanidad... La ciencia nos dice que somos los servidores de la naturaleza: Todo está en orden, haced el amor y rompeos la cabeza; continuad, muchachos, hombres, amables burgueses, periodistas vírgenes... Yo estoy contra los sistemas: el único sistema todavía aceptable es el de no tener sistemas. Completarse, perfeccionarse en nuestra pequeñez hasta colmar el vaso de nuestro yo, valor para combatir en pro y en contra del pensamiento, misterio de pan, desencallamiento súbito de una hélice infernal hacia lirios baratos.
fragmento Manifiesto Dada, Tristán Tzara |
Pinkola
La pestaña del lobo
Si no sales al bosque, jamás ocurrirá nada y tu vida jamás empezará -No salgas al bosque, no salgas -dijeron ellos. -¿Por qué no? ¿Por qué no tengo que salir al bosque esta noche? - preguntó ella. -En el bosque habita un enorme lobo que se come a las personas como tú. No salgas al bosque, no salgas por lo que más quieras. Pero, naturalmente, ella salió al bosque y, como era de esperar, se encontró con el Lobo, tal como ellos le habían advertido. -¿Lo ves? Ya te lo decíamos -graznaron. -Eso es mi vida, no un cuento de hadas, zopencos -replicó ella-. Tengo que ir al bosque y encontrarme con el lobo; de lo contrario, mi vida jamás podrá empezar. Pero el lobo que ella encontró había caído en una trampa, se le había quedado la pata prendida en un cepo. -¡Socorro, auxilio! ¡Ay, ay, ay! -gritaba el lobo-. ¡Socorro, ayúdame y te daré la justa recompensa! -añadió. Porque eso es lo que hacen los lobos en los cuentos de esta clase. -¿Y cómo sé yo que no me vas a hacer daño? -le preguntó ella, pues su misión era hacer preguntas-. ¿Cómo sé yo que no me matarás y me dejarás reducida a los puros huesos? -Mala pregunta -dijo el lobo-. Tendrás que confiar en mi palabra. Y el lobo reanudó sus aullidos y lamentos. ¡Ay! ¡Ay! ¡Ay! Sólo hay una pregunta que merece la pena hacer, hermosa doncella, ¿dóooonde está el almaaaaaa? -Oh, lobo, voy a correr el riesgo. ¡Vamos allá! Abrió la trampa, el lobo sacó la pata y ella se la envolvió con hierbas medicinales y plantas. -Oh, gracias, dulce doncella, mil gracias --dijo el lobo, lanzando un suspiro. Pero, como había leído demasiados cuentos que no debía, ella exclamó: -Bueno, ahora ya puedes matarme, anda, terminemos de una vez. Pero no fue eso lo que ocurrió. En su lugar, el lobo alargó la pata y se la apoyó en el brazo. -Soy un lobo de otro tiempo y lugar -dijo. Y, arrancándose una pestaña del ojo, se la entregó diciendo-: Úsala y procura ser sabia. De ahora en adelante sabrás quién es bueno y quién no lo es tanto. Mira a través de mi ojo y lo verás todo con claridad. Por dejarme vivir, te ofrezco vivir como jamás en tu vida has vivido. Recuerda que sólo hay una pregunta que merece la pena hacer, hermosa doncella, ¿dóooonde está el almaaaaaa? Y así la doncella regresó a la aldea, alegrándose de estar viva. Y esta vez cuando ellos le dijeron, "Quédate aquí y cásate conmigo", o "Haz lo que te digo", o "Di lo que yo quiero que digas, pero que todo quede tan en secreto como el día en que viniste", la doncella tomó la pestaña del lobo miró a través de ella y vio sus motivos tal como jamás los había visto. Y la vez en que el carnicero pesó la carne ella miró a través de la pestaña del lobo y vio que pesaba también su pulgar. Y miró al pretendiente que le decía "Soy el que te conviene", y vio que no le convenía para nada. Y de esta manera y muchas más se salvó no de todas pero sí de muchas desgracias. Pero, además, con esta nueva visión, no sólo vio al astuto y al cruel sino que el corazón se le hizo inmensamente grande, pues miraba a las personas y las volvía a calibrar gracias al don que le había otorgado el lobo al que ella había salvado. Y vio a los que eran verdaderamente buenos y se acercó a ellos, encontró a su compañero y permaneció a su lado todos los días de su vida, percibió a los valerosos y se acercó a ellos, captó a los fieles y se unió a ellos, vio perplejidad por debajo de la cólera y se apresuró a disiparla, vio amor en los ojos de los tímidos y se inclinó hacia ellos, vio sufrimiento en los callados y cortejó su risa, vio necesidad en el hombre sin palabras y le habló, vio fe en lo más hondo de la mujer que afirmaba no tenerla y se la volvió a encender con la suya. Vio todas las cosas con la pestaña del lobo, todas las cosas verdaderas y todas las cosas falsas, todas las cosas que iban contra la vida y todas las cosas que iban a favor de la vida, todas las cosas que sólo podían verse a través de los ojos de aquel que pesa el corazón con el corazón, y no sólo con la mente. Así descubrió que era cierto lo que dicen, que el lobo es la más sabia de las criaturas. Si prestas atención, el lobo cuando aúlla hace siempre la pregunta más importante, no dónde está el alimento más próximo, la pelea más próxima o la danza más próxima, sino la pregunta más importante para ver dentro y detrás, para sopesar el valor de todo lo que vive, ¿dóooonde estáaaa el almaaaa? ¿Dónde está el alma? ¿Dónde está el alma? Sal al bosque, sal enseguida. Si no sales al bosque, jamás ocurrirá nada y tu vida no empezará jamás. Sal al bosque, sal enseguida. Sal al bosque, sal enseguida. |
“¡DIOS ES UNA NEGRA LESBIANA DE CIENTO-OCHENTA QUILOS!”
-Bukowski, La venganza de los Malditos |
Transcripto a pulmón. . . :D
Martín la miró: estaba de espaldas, respirando ansiosamente por su boca entreabierta, su gran boca desdeñosa y sensual. Su pelo largo y lacio, renegrido (con aquellos reflejos rojizos que indicaban que esa Alejandra era la misma chiquilina pelirroja de la infancia y algo a la vez tan distinto ¡tan distinto!), desparramado sobre la almohada, destacaba su rostro anguloso, esos rasgos que tenían la misma nitidez, la misma dureza que su espíritu. Temblaba y estaba lleno de ideas confusas, nunca antes sentidas. La luz del velador iluminaba su cuerpo abandonado, sus pechos que se marcaban debajo de su blusa blanca, y aquellas largas y hermosas piernas encogidas que lo tocaban. Acercó una de sus manos a su cuerpo, pero antes de llegar a colocarla sobre él, la retiró asustado. Luego, después de grandes vacilaciones, su mano volvió a acercarse a ella y finalmente se posó sobre uno de sus muslos. Así permaneció, con el corazón sobresaltado, durante un largo rato, como si estuviera cometiendo un robo vergonzoso, como si estuviera aprovechando el sueño de un guerrero para robarle un pequeño recuerdo. Pero entonces ella se dio vuelta y él retiró su mano. Ella encogió sus piernas, levantando las rodillas y curvó su cuerpo como si volviera a la posición fetal. El silencio era profundo y se oía la agitada repiración de Alejandra y algún silbato lejano de los muelles. Nunca la conoceré del todo, pensó, como en una repentina y dolorosa revelación. Estaba ahí, al alcance de su mano y de su boca. En cierto modo estaba sin defensa ¡pero qué lejana, qué inaccesible que estaba! Intuía que grandes abismos la separaban (no solamente el abismo del sueño sino otros) y que para llegar hasta el centro de ella habría que marchar durante jornadas temibles, entre grietas tenebrosas, por desfiladeros peligrosísimos, al borde de volcanes en erupción, entre llamaradas y tinieblas. Nunca, pensó, nunca. [. . .] Ciegos, pensó, casi con miedo. Ciegos, ciegos. La noche, la infancia, las tinieblas, las tinieblas, el terror y la sangre, sangre, carne y sangre, los sueños, abismos, abismos insondables, soledad soledad soledad, tocamos pero estamos a distancias inconmensurables, tocamos pero estamos solos. Era un chico bajo una cúpula inmensa, en medio de la cúpula, en medio de un silencio aterrador, solo en aquel inmenso universo gigantesco. Ernesto Sabato, Sobre Héroes y Tumbas, El Dragón y La Princesa, XI Dios existe, pero a veces duerme: sus pesadillas son nuestra existencia. Ernesto Sabato, Sobre Héroes y Tumbas, Informe sobre Ciegos, III |
THE MAYAN CAPER--THE CENTIPEDE SWITCH --THE HEAVY METAL GIMMICK.
I Sekuin, perfected these arts along the streets of Minraud. Under sign of the Centipide. A captive head. In Minrauud time. In the tattoo booths. The flesh graft parlors. Living wax works of Minraud. Saw the dummies made to impression. While you wait. From short-time. In the terminals of Minraud. Saw the white bug juice spurt from ruptured spines. In the sex rooms of Minraud. While you wait. In Minraud time. The sex devices of flesh. The centipide penis. Insect hairs thru grey-purple flesh. Of the scorpion people. The severed heads. In tanks of sewage. Eating green shit. In the aquariums of Minraud. The booths of Minraud. Under sing of the centipide. The sex rooms and flesh films of Minaraud. I Sekuin a captive head. Learned the drugs of Minraud. In flak Braille. Rot brain and spine. Leave a crab body broken on the brass and copper street. I Sekuin captive head. Carried thru the booths of Minraud. By Arms. Legs. William Burroughs, The Soft Machine. |
Cita:
Desmesura, puse algo de Artaud en este post pero preferí no poner su nombre para no promocionarlo.. quizá te parezca interesante. Lo vuelvo a copiar seguidamente: "Todo verdadero sentimiento es en realidad intraducible. Expresarlo es traicionarlo. Pero traducirlo es disimularlo. La expresión verdadera oculta lo que manifiesta. Opone el espíritu al vacío real de la naturaleza, y crea, como reacción, una especie de lleno en el pensamiento. O, si se prefiere, en relación con la manifestación-ilusión de la naturaleza, crea un vacío en el pensamiento. Todo sentimiento poderoso produce en nosotros la idea del vacío. Y el lenguaje claro que impide ese vacío impide asimismo la aparición de la poesía en el pensamiento. Por eso una imagen, una alegoría, una figura que ocultan lo que quisieran revelar significan más para el espíritu que las claridades de los análisis de la palabra. Por eso la verdadera belleza nunca nos hiere directamente. El sol poniente es hermoso por todo lo que nos hace perder." lo escribió en "El teatro y su doble" antes de describir el "teatro de la crueldad" |
"Por vuestra ley inicua ustedes ponen en manos de personas en las que no tengo confianza alguna, castrados en medicina, farmacéuticos de porquería, jueces fraudulentos, doctores, parteras, inspectores doctorales, el derecho a disponer de mi angustia, de una angustia que es en mí tan aguda como las agujas de todas las brújulas del infierno..."
Y este fragmento me recuerda el desprecio de Artaud en dejarse manipular por manos "expertas", detestaba al doctor que trató a Van gogh durante sus últimos meses de vida porqué según Artaud disminuía su capacidad creativa: El doctor Gachet no le decía a Van Gogh que estaba allí para modificar su pintura, pero lo mandaba a pintar del natural, a sumergirse en un paisaje para evitarle el tormento de pensar. |
Comparto lo de buscar esas fuerzas elementales del individuo cuando se vive en sociedad, y bajo una cultura.
EL OMBLIGO DE LOS LIMBOS Allí donde otros exponen su obra yo sólo pretendo mostrar mi espíritu. Vivir no es otra cosa que arder en preguntas. No concibo la obra al margen de la vida. No amo en sí misma a la creación. Tampoco entiendo el espíritu en sí mismo. Cada una de mis obras, cada uno de los proyectos de mí mismo, cada uno de los brotes gélidos de mi vida interior expulsa sobre mí su baba. Estoy en una carta escrita para dar a entender el estrujamiento íntimo de mi ser, tanto como estoy en un ensayo exterior a mí mismo y que se me presenta como una indiferente incubación de mi espíritu. Sufro que el Espíritu no halle lugar en la vida y que la vida no se encuentre en el Espíritu, sufro del Espíritu-órgano, del Espíritu-traducción o del Espírítu-atemorizante-de-las-cosas para hacerlas ingresar en el Espíritu. Yo dejo este libro colgado de la vida, deseo que sea masticado por las cosas exteriores y en primer término por todos los estremecimientos acuciantes, todas las vacilaciones de mi yo por venir. Todas estas páginas se arrastran en el espíritu como témpanos. Perdón por mi total libertad. Me niego a hacer diferencias entre cada minuto de mí mismo. No acepto el espíritu planeado. Es preciso acabar con el Espíritu como con la literatura. Quiero decir que el Espíritu y la vida se encuentran en todos los grados. Yo quisiera hacer un libro que altere a los hombres, que sea como una puerta abierta que los lleve a un lugar al que nadie hubiera consentido en ir, una puerta simplemente ligada con la realidad. Y esto no es el prefacio de un libro, como tampoco lo son los poemas que lo indican en la lista de todas las furias del malestar. |
Si esto es un hombre
Los que vivís seguros En vuestras casas caldeadas Los que os encontráis, al volver por la tarde, La comida caliente y los rostros amigos: Considerad si es un hombre Quien trabaja en el fango Quien no conoce la paz Quien lucha por la mitad de un panecillo Quien muere por un sí o por un no. Considerad si es una mujer Quien no tiene cabellos ni nombre Ni fuerzas para recordarlo Pensad que esto ha sucedido: Os encomiendo estas palabras. Grabadlas en vuestros corazones Al estar en casa, al ir por la calle, Al acostaros, al levantaros; Repetídselas a vuestros hijos. O que vuestra casa se derrumbe, La enfermedad os imposibilite, Vuestros descendientes os vuelvan el rostro. -Primo Levi |
No eres tú el confesionario, ¡oh Papa!, lo somos nosotros; compréndenos y que los católicos nos comprendan.
En nombre de la Patria, en nombre de la Familia, impulsas a la venta de las almas y a la libre trituración de los cuerpos. Entre nuestra alma y nosotros mismos, tenemos bastantes caminos que transitar, bastantes distancias que salvar, para que vengan a interponerse tus tambaleantes sacerdotes y ese cúmulo de aventuradas doctrinas con que se nutren todos los castrados del liberalismo mundial. A tu dios católico y cristiano que - como los otros dioses - ha concebido todo el mal: 1. Te lo has metido en el bolsillo. 2. Nada tenemos que hacer con tus cánones, index, pecados, confesionarios, clerigalla; pensamos en otra guerra, una guerra contra ti, Papa, perro. Aquí el espíritu se confiesa al espíritu. De la cabeza a los pies de tu mascarada romana, triunfa el odio a las verdades inmediatas del alma, a esas llamas que consumen el espíritu mismo. No hay Dios, Biblia o Evangelio, no hay palabras que detengan al espíritu. No estamos en el mundo. ¡Oh Papa confinado en el mundo!, ni la tierra ni Dios hablan de ti. El mundo es el abismo del alma, Papa contrahecho, Papa ajeno al alma; déjanos nadar en nuestros cuerpos, deja nuestras almas en nuestras almas; no necesitamos tu cuchillo de claridades. |
Não sou nada.
Nunca serei nada. Não posso querer ser nada. À parte isso, tenho em mim todos os sonhos do mundo. Janelas do meu quarto, Do meu quarto de um dos milhões do mundo que ninguém sabe quem é (E se soubessem quem é, o que saberiam?), Dais para o mistério de uma rua cruzada constantemente por gente, Para uma rua inacessível a todos os pensamentos, Real, impossivelmente real, certa, desconhecidamente certa, Com o mistério das coisas por baixo das pedras e dos seres, Com a morte a pôr umidade nas paredes e cabelos brancos nos homens, Com o Destino a conduzir a carroça de tudo pela estrada de nada. [...] Que sei eu do que serei, eu que não sei o que sou? Ser o que penso? Mas penso tanta coisa! E há tantos que pensam ser a mesma coisa que não pode haver tantos! Gênio? Neste momento Cem mil cérebros se concebem em sonho gênios como eu, E a história não marcará, quem sabe?, nem um, Nem haverá senão estrume de tantas conquistas futuras. Não, não creio em mim. Em todos os manicômios há doidos malucos com tantas certezas! Eu, que não tenho nenhuma certeza, sou mais certo ou menos certo? Não, nem em mim... Em quantas mansardas e não-mansardas do mundo Não estão nesta hora gênios-para-si-mesmos sonhando? Quantas aspirações altas e nobres e lúcidas - Sim, verdadeiramente altas e nobres e lúcidas -, E quem sabe se realizáveis, Nunca verão a luz do sol real nem acharão ouvidos de gente? O mundo é para quem nasce para o conquistar E não para quem sonha que pode conquistá-lo, ainda que tenha razão. Tenho sonhado mais que o que Napoleão fez. Tenho apertado ao peito hipotético mais humanidades do que Cristo, Tenho feito filosofias em segredo que nenhum Kant escreveu. Mas sou, e talvez serei sempre, o da mansarda, Ainda que não more nela; Serei sempre o que não nasceu para isso; Serei sempre só o que tinha qualidades; Serei sempre o que esperou que lhe abrissem a porta ao pé de uma parede sem porta, E cantou a cantiga do Infinito numa capoeira, E ouviu a voz de Deus num poço tapado. Crer em mim? Não, nem em nada. Derrame-me a Natureza sobre a cabeça ardente O seu sol, a sua chuva, o vento que me acha o cabelo, E o resto que venha se vier, ou tiver que vir, ou não venha. Escravos cardíacos das estrelas, Conquistamos todo o mundo antes de nos levantar da cama; Mas acordamos e ele é opaco, Levantamo-nos e ele é alheio, Saímos de casa e ele é a terra inteira, Mais o sistema solar e a Via Láctea e o Indefinido. (Come chocolates, pequena; Come chocolates! Olha que não há mais metafísica no mundo senão chocolates. Olha que as religiões todas não ensinam mais que a confeitaria. Come, pequena suja, come! Pudesse eu comer chocolates com a mesma verdade com que comes! Mas eu penso e, ao tirar o papel de prata, que é de folha de estanho, Deito tudo para o chão, como tenho deitado a vida.) Mas ao menos fica da amargura do que nunca serei A caligrafia rápida destes versos, Pórtico partido para o Impossível. Mas ao menos consagro a mim mesmo um desprezo sem lágrimas, Nobre ao menos no gesto largo com que atiro A roupa suja que sou, em rol, pra o decurso das coisas, E fico em casa sem camisa. [...] Meu coração é um balde despejado. Como os que invocam espíritos invocam espíritos invoco A mim mesmo e não encontro nada. Chego à janela e vejo a rua com uma nitidez absoluta. Vejo as lojas, vejo os passeios, vejo os carros que passam, Vejo os entes vivos vestidos que se cruzam, Vejo os cães que também existem, E tudo isto me pesa como uma condenação ao degredo, E tudo isto é estrangeiro, como tudo.) Vivi, estudei, amei, e até cri, E hoje não há mendigo que eu não inveje só por não ser eu. Olho a cada um os andrajos e as chagas e a mentira, E penso: talvez nunca vivesses nem estudasses nem amasses nem cresses (Porque é possível fazer a realidade de tudo isso sem fazer nada disso); Talvez tenhas existido apenas, como um lagarto a quem cortam o rabo E que é rabo para aquém do lagarto remexidamente. Fiz de mim o que não soube, E o que podia fazer de mim não o fiz. O dominó que vesti era errado. Conheceram-me logo por quem não era e não desmenti, e perdi-me. Quando quis tirar a máscara, Estava pegada à cara. Quando a tirei e me vi ao espelho, Já tinha envelhecido. Estava bêbado, já não sabia vestir o dominó que não tinha tirado. Deitei fora a máscara e dormi no vestiário Como um cão tolerado pela gerência Por ser inofensivo E vou escrever esta história para provar que sou sublime. [...] Sempre uma coisa defronte da outra, Sempre uma coisa tão inútil como a outra, Sempre o impossível tão estúpido como o real, Sempre o mistério do fundo tão certo como o sono de mistério da superfície, Sempre isto ou sempre outra coisa ou nem uma coisa nem outra. Mas um homem entrou na Tabacaria (para comprar tabaco?) E a realidade plausível cai de repente em cima de mim. Semiergo-me enérgico, convencido, humano, E vou tencionar escrever estes versos em que digo o contrário. [...] Depois deito-me para trás na cadeira E continuo fumando. Enquanto o Destino mo conceder, continuarei fumando. (Se eu casasse com a filha da minha lavadeira Talvez fosse feliz.) Visto isto, levanto-me da cadeira. Vou à janela. O homem saiu da Tabacaria (metendo troco na algibeira das calças?). Ah, conheço-o; é o Esteves sem metafísica. (O Dono da Tabacaria chegou à porta.) Como por um instinto divino o Esteves voltou-se e viu-me. Acenou-me adeus, gritei-lhe Adeus ó Esteves!, e o universo Reconstruiu-se-me sem ideal nem esperança, e o Dono da Tabacaria sorriu. Tabacaria, Fernando Pessoa. |
gaiman
"Other People" is a short-short story about a man's descent into Hell. The man arrives with his expensive clothes and arrogant attitude in a long grey room. Along the walls are 211 implements of torture; a demon stands at the far end. The man, who we can only assume was a high-powered businessman in life, who probably broke a few rules and lived more than a little dishonestly to deserve his fate, approaches the demon. The demon, who is deeply scarred, flayed, and missing its ears and its genitalia, takes down from the wall a cat-o'-nine-tails made of frayed wire and beats the businessman with it. The demon explains that time is fluid in this place, implying that the businessman will not be leaving anytime soon.
"In time," the demon tells him, "you will remember even this moment with fondness." The demon eventually uses all two hundred and eleven torture devices on the businessman, each one worse than the last, until the businessman is a shivering, gibbering wreck. The scars that have been left on his body are deep and painful and indelible. He hurts more than he has ever been hurt before. But now, the torture really begins. The demon lays naked every lie the businessman ever told, everything he ever regretted, every hurt he ever inflicted on another. He draws each piece out of the businessman, displaying them for the man to see. It goes on for a hundred years, or perhaps a thousand—for time is fluid here—and when it is over, the businessman realizes the demon was right. The physical torture was far kinder Then it begins again, but with the businessman's sense of self-knowledge that wasn't there before, which makes it all the worse. When it's over, the demon says, "Again," and this time the businessman is exposed to the consequences of his actions, what happened to the people he interacted with after they left his presence. He sees all the ways he has affected other people's lives, and it leaves him with even more self-loathing than before. A thousand years later, he finishes. "Again," the demon says. This time he experiences his life as he tells it, leaving nothing out, facing everything and everyone he ever hurt. He opens his heart completely. When he finishes, he expects to hear the demon say, "Again," but he is alone. He stands up and looks to the far side of the room, where the only door to the chamber has just opened and closed. A suited figure in expensive and familiar clothes stands there, fear and pride and arrogance in his eyes, and the businessman finally understands. As the suited figure approaches him, the businessman (who now looks an awful lot like a demon) tells the new arrival, "Time is fluid here." |
A great tale Su. This make me remember a Terry Pratchett book named "Eric". I recommend it to you.
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Si el Rei vol corona, corona li darem: que vingui a Barcelona i el coll li tallarem.
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Es en ese rincón, es en esa espera, es en esa oscuridad, que tus brazos se agitan. Que tu piel me cubra, que tu mirada se cierre para no herirme, poco importa, cuando lo que he imaginado es el infierno. ¿He dicho infierno? Digo llama, digo fuego, digo quemadura que no se agota. ¿He dicho oscuridad? Sirva el cielo al mediodía, sirva el aire, el simple aire que nos rodea.
Corta, corta cada uno mis cabellos. Se clava en cada uno de los poros de mi piel retraída. Y no, no puedo buscar causa, motivo, razón. Sucede. Y no, no puedo señalar culpable, responsable, causante. Sucede. Y mi mirada se queda, allí, en la oscuridad, en el hielo, en el rincón, la misma mirada de la primera edad, aquella en la que te rebelaste, sin fuerza, por instinto, aún por instinto, para decirle, ¿a quién? No seas ingenuo ¿al mundo? ¿al ser amado? No, para decir, sin que fuera oído, escuchado, atendido, que ya eras ser doliente, que ya eras sonrisa que se regala, que ya eras alegría que se entrega, que ya eras temblor que no deja sentir. Si pudieras soñar de nuevo tu selva, tu océano. Si pudieras, con el solo impulso de un pensamiento quedar suspendido de los más altos y hermosos y perfumados árboles. Si pudieras, con un solo aliento quedar en la lámina de agua más distante de cualquier tierra, de cualquier polvo, de cualquier mancha, anhelante, deseoso, del salto de un esbelto y plateado animal marino que salpicara tu cara, tu cara desolada por el viento. Si pudieras. Volver a soñarlo. El salto. ¿Qué darías? ¿Qué serías capaz de entregar esta noche? Algo más que tu vida, algo más que algo tan intangible como un alma, un espíritu, una nube que recorre tu carne y tu pensamiento. Algo más que tu memoria bella, algo más que tus recuerdos forjados en mármol, laborioso esfuerzo, entregada energía, fuerza, brío, no sé cómo decirlo. Recuerdos esculpidos, recuerdos pintados, recuerdos recogidos en una palabra tras otra. Todo lo darías. Por soñar de nuevo, que una piel desconocida, una piel de animal marino, una piel de salvaje fiereza oceánica toca tu piel serena, la roza, la salpica, pasa a una cierta distancia, la suficiente, para percibir que la vida era eso, un instante. No desazona. Llena. Hinche. Completa. Cierra el círculo. De la mirada. Del ojo. Del órgano, del sentido. |
"Es lo único que tengo"
-Lenin en 1922 refiriendosé a la Revolución de Octubre. |
Mi no saber por q haber sido tirado
Ese texto está muy bien, dalmata. Eso es pasión..
¿No será tuyo? Y hablando de Gaiman, yo aún no leí Sandman :? (supongo q se hará antes la película...). |
Re: Mi no saber por q haber sido tirado
Cita:
No parece que vaya a hacerse una pelicula de Sandman pero si sobre uno de los personajes. http://www.aintitcool.com/node/30262 |
Under the spreading chestnut tree
I sold you and you sold me. |
Re: Mi no saber por q haber sido tirado
Cita:
En esa página me he enterado q ha muerto Robert Altman. Me costó encontrar la noticia en internet (pensé si no sería cierto), y después ya la he visto en la tele. Vaya. |
Es posible que, al iniciar la sustitución, lo haga con plena conciencia de estar creando un guión enmendado, mendaz, restaurado, pero menos doloroso que el verdadedoro; conforme se lo va repitiendo a los demás, pero también a sí mismo, las distinciones entre lo verdadero y lo falso pierden progresivamente sus contornos y el hombre termina por creer plenamente en el relato que ha hecho tantas veces y que sigue haciendo, limando y retocando acá y allá los detalles menos creíbles, incongruentes o incompatibles en el cuadro de los sucesos de los cuales dice estar enterado: la mala fe inicial se ha convertido en buena fe. El paso silencioso de la mentira al autoengaño es útil: quien miente de buena fe miente mejor, recita mejor su papel, es creído con más facilidad por el juez, el historiador, el lector, la mujer y los hijos.
-Primo Levi, Los Hundidos y los Salvados. Tras la Segunda Guerra Mundial, muchos oficiales y funcionarios nazis afirmaban haber actuado de la única forma en la que podían haberlo hecho, la razón: habían sido engendrados y crecido en un ambiente totalitario que deformo sus personalidades de tal forma que consiguió generar seres obedientes y sin criterio personal, máquinas perfectas, extensiones del Partido nazi y de las decisiones de este y el Führer. Levi razona en ese texto como muchos de esos oficiales creaban esa imagen del Estado Totalitario omnipresente para exculparse a ellos mismos de las atrocidades cometidas, como el Goliadkin de Dostoyevski creaba a su doble para obviar sus propios defectos: esas mentiras que en contados casos era deliberada, se convierte en otros muchos en verdad, verdad en la cabeza del mentiroso. |
Era algo así como cultivar la separación (en referencia al estudiante de arte). Pero también era autoconservación, porque este era el único modo en que podían definirse a sí mismos contra la mediocridad visual y cultural de los valores de la sociedad dominante estadounidense. Era el único modo de poder decirles a sus familias: "No vamos a vivir ese tipo de vida; vamos a buscar una nueva vía y a seguir nuestros propios deseos creativos". Parte de todo esto era necesario y sano, como siempre lo han sido los movimientos bohemios y de vanguardia; pero también había una parte de tristeza y soledad, especialmente cuando no podían encontrar el camino de vuelta a la sociedad. Y nosotros los docentes éramos incapaces de imaginar cómo traerlos de vuelta. Muchos de los docentes se contentaban con ese estado de cosas porque también ellos se sentían alienados y aislados. Y así se perpetuaba la idea de que la libertad se encuentra fuera de la sociedad.
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Y revelador de la propia ceguera defensiva.
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Docentes (de arte) demasiado comprensivos diría yo. Supongo q habla de un movimiento artístico "a toro pasado", cuando ya fueron reconocidos, si no esa humildad y esa consciencia, yo no la he encontrado.
(¿Q habla de la generación Beat?). |
el párrafo lo tomo desde una visión de pesimismo optimista, aunque durante mucho tiempo lo entendí al revés, a través de un optimismo pesimista. No habla directamente de la generación Beat aunque se refiere al estudiante de hace tres décadas, más o menos cuando todos querían tener algo de Beat en sus cocos. Más o menos cuando en USA se estaba pasando de la crítica a la masificación a la masificación de críticas.
Es una entrevista de Suzi Gablick a Carol Becker, degana de la Escuela de Arte de Chicago. Cuando habla de docentes habla de docentes de hace tres décadas por lo que el punto de vista que adopta Carol Becker aplicarlo hoy por hoy es muy discutible, pero es interesante porque lo discutible hace pensar. |
No creo que sea tan discutible, es más, creo que ese argumento tiene plena vigencia, incluso más que hace tres décadas en tanto que la sociedad occidental ha continuado ahondando en su deriva alienacionista. Se podría hablar de los hijos de la generación derrotada sin miedo a caer en el anacronismo.
Otro párrafo de Levi: La ascensión de los privilegiados, no solo en el Lager sino en todo lugar de convivencia humana, es un fenómeno angustioso pero inevitable: sólo en las utopías no existe. Es deber del justo hacer la guerra a todo privilegio inmerecido, pero no debemos olvidar que se trata de una guerra sin fin. Donde hay poder ejercido por pocos, o por uno solo, contra muchos, el privilegio nace y prolifera, aun contra el deseo del poder mismo; pero es normal que el poder lo proteja y lo estimule. |
Não cheguei a sabê-lo, ceguei precisamente quando estava a olhar para o cavalo. O medo cega, disse a rapariga dos óculos escuros, São palavras certas, já éramos cegos no momento em que cegámos, o medo nos cegou, o medo nos fará continuar cegos, Quem está a falar, perguntou o médico, Um cego, respondeu a voz, só um cego, é o que temos aqui.
[...] A continuarem assim as coisas, acabaremos, uma vez mais, por ter de chegar à conclusão de que mesmo nos males piores é possível achar-se uma porção de bem suficiente para que os levemos, aos ditos males, com paciência, o que, transportado para a presente situação, significa que, contrariamente às primeiras e inquietantes previsões, a concentração dos alimentos em uma única entidade rateadora e distribuidora tinha, afinal, os seus aspectos positivos, por muito que se queixassem alguns idealistas que teriam preferido continuar a lutar pela vida pelos seus próprios meios, mesmo tendo de passar por causa dessa teimosia alguma fome. [...] A dez metros, um cego estava deitado em cima de uma cega, ele enganchado entre as pernas dela, faziam-no o mais discretamente que podiam, eram dos discretos em público, mas não seria preciso ter o ouvido muito apurado para saber em que se ocupavam, muito menos quando um e outro já não puderam reprimir os ais e os gemidos, alguma palavra inarticulada, que são os sinais de que tudo aquilo está prestes a acabar. A mulher do médico ficou parada a olhá-los, não por inveja, tinha o seu marido e a satisfação que ele lhe dava, mas por causa de uma impressão doutra natureza, para a qual não encontrava nome, poderia ser um sentimento de simpatia, como se estivesse a pensar em dizer-lhes Não liguem a estar eu aqui, também sei o que isso é, continuem, poderia ser um sentimento de compaixão Ainda que esse instante de gozo supremo pudesse durar-vos a vida inteira, nunca os dois que sois poderíeis chegar a ser um só. O cego e a cega descansavam agora, já separados, um ao lado do outro, mas continuavam de mãos dadas, eram novos, talvez fossem namorados, tinham ido ao cinema e ali cegaram, ou um acaso milagroso os juntou aqui, e, sendo assim, como foi que se reconheceram, ora essa, pelas vozes, claro está, não é só a voz do sangue que não precisa de olhos, o amor, que dizem ser cego, também tem a sua palavra a dizer. O mais provável, porém, é que os tivessem apanhado ao mesmo tempo, nesse caso aquelas mãos entrelaçadas não são de agora, estão assim desde o princípio. [...] Os cegos enamorados já não estavam de mãos dadas, dormiam deitados de lado, encolhidos para conservarem o calor, ela na concha formada pelo corpo dele, afinal, reparando melhor, tinham-se dado as mãos, o braço dele por cima do corpo dela, os dedos entrelaçados. (Ensaio sobre a cegueira, José Saramago). |
[...]la única vez que interpreté un papel fue hace un montón de años, en una representación de aficionados (dirigida por mi padre) celebrada en nuestra señorial residencia campestre. No tuve que decir más que unas pocas palabras: "El príncipe me pide que anuncien su inminente llegada. ¡Ah¡ ¡Ahí viene!", en lugar de lo cual, temblando de placer y emoción dije: "El príncipe no puede venir; se ha cortado la garganta con la navaja"; y, mientras yo decía esto el caballero que hacía el papel de príncipe se acercaba ya, con una sonrisa deslumbrante en los maravillosamente pintados labios, y hubo un momento de sorpresa general, el mundo entero contuvo el aliento...
-Nabokov |
There was once a poor farmer who could afford to own just one horse. He cared well for the animal, but one summer night, it escaped through a weak fence and ran away.
When his neighbors discovered what had happened, they visited to offer their condolences. "What bad luck!" they exclaimed. The farmer replied, "Maybe. Maybe not." A week later, the fugitive horse sauntered back to the homestead, accompanied by six wild horses. The farmer and his son managed to corral all of them. Again the neighbors descended. "What great luck!" they exclaimed. "Maybe," the farmer replied. "Maybe not." Soon the farmer's son began the work of taming the new arrivals. While attempting to ride the roan stallion, he was thrown to the ground and half-trampled. His leg was badly broken. The neighbors came to investigate. "What terrible luck!" they exclaimed. The farmer replied, "Maybe. Maybe not." The next day, soldiers visited the farmer's village. Strife had recently broken out between two warlords, and one of them had come to conscript all the local young men. Though every other son was commandeered, the farmer's boy was exempted because of his injury. The neighbors gathered again. "What fantastic luck!" they exclaimed. "Maybe," the farmer said. "Maybe not." |
Jean Jaques Rousseau
Mientras los hombres se contentaron con cabañas rústicas, mientras se limitaron a coser sus vestidos de pieles con espinas o raspas, a adornarse con plumas y cochinillas, a pintarse el cuerpo de diversos colores, a perfeccionar o embellecer sus arcos y sus flechas, a tallar con piedras cortantes algunas canoas de pescadores o algunos toscos instrumentos musicales; en una palabra, mientras se aplicaron únicamente a obras que podía hacer solo o a artes que no necesitaban la colaboración de varias manos, vivieron libres, sanos, buenos y felices tanto como podían serlo por naturaleza y continuaron gozando entre ellos las dulzuras de un comercio independiente: pero desde el momento en que un hombre necesitó la ayuda de otro; desde que comprendió que a uno sólo le resultaba útil tener previsiones para dos, la igualdad desapareció, la propiedad se introdujo, el trabajo se volvió necesario y las vastas selvas se transformaron en campos rientes que fue preciso regar con el sudor de los hombres y donde pronto se vio germinar y crecer con las cosechas la esclavitud y la miseria.
Hay cosas tan fáciles de comprender.. |
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