Respuesta: Escribir lo que se nos de la gana
 

¿Miedo?, ¿pena?, ¿impaciencia? ¡Nunca! :sarcastico:

Respuesta: Escribir lo que se nos de la gana
 

La mencionada mujer no estaría preguntando por el sexo del animal?

Respuesta: Escribir lo que se nos de la gana
 

:D a lo mejor era espía rusa, y confundiendo a Libertad con su contacto, dijo esperro, osea, que esperaba.....

:madremia:

Respuesta: Escribir lo que se nos de la gana
 

Respuesta: Escribir lo que se nos de la gana
 

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Respuesta: Escribir lo que se nos de la gana
 

tranqui..... no hace falta que te pongas así :nolose:, solo se me ocurrió un chiste

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Sí claro, jeje, sé que preguntaba por el sexo del animal, hace 13 años que tengo a mi perro y esa pregunta me la han hecho miles de veces, lo que pasa, que hoy no sé por qué, me ha parecido curiosa e incorrecta esa forma de preguntarlo y he estado a punto de decirle lo del gato...

Sobre lo del tigre, contando que es un perro de 6 kilos... la verdad es que el niño me ha hecho reír :D

Respuesta: Escribir lo que se nos de la gana
 

Es posible que hoy sea el cumpleaños de nuestra querida y polemica Gusanos?:pensando:
Si es así, que tenga usted un feliz día del nombre como dicen en Juego de Tronos :mrgreen:

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Respuesta: Escribir lo que se nos de la gana
 

A veces ya llevamos el rencor dentro y da igual lo que nos digan, nos lo tomamos todo por la tremenda... y yo el primero.

Efectivamente, Vomit, pudiera haber tratado de interesarse por el sexo del animal. En ocasiones esperamos una señal de hostilidad por parte del "otro" para poder lanzar todos nuestros cuchillos y serpientes envenenadas.

Te comprendo, Libertad. La realidad es que muchas veces tal señal nunca llega pero nos la inventamos. Nos creamos nuestro propio "casus belli" ficticio. Y todo gracias a la fobia social, a los pensamientos críticos sobre nuestro "yo" que tenemos funcionando todo el día.

Y digo yo, alguien nos habrá provocado tales grietas en nuestro autoconcepto en algún momento, ¿verdad? Padres, familia extensa, amigos, pareja, compañeros, etc. Nuestra es la tarea de depurar tales berrañas mentales y quedar bien limpitos y en paz con nosotros mismos. En eso estamos. La pena es que a veces creamos nuestras propias víctimas propiciatorias como efectos colaterales de la rabia que nos domina.