Iniciado por Sherezadee (Mensaje 718576)

alomejor lo somos quien sabe :risita:

Iniciado por Ramiro_Lopez (Mensaje 718925)

Tengo sólo facebook y lo utilizo para saber las actividades/novedades de paginas o deportistas que me gustan.

Iniciado por Pocaspecas (Mensaje 717347)

Va por épocas, ha habido veces que he estado muy metida en algo y me relacionaba bastante bien dentro de la red y tenía amistades y contactos que en ocasiones salían también a fuera de la red y otras no. Pero vaya, que si me ha gustado relacionarme con gente afín o por diversión en algún tipo de red social.

En cambio el Facebook nunca ha sido santo de mi devoción, pasé muchos años sin animarme a probarlo, aunque gente me dijera de hacerme uno yo pasaba de sus consejos porque el único aliciente era agregar a esa persona y no era alguien que me interesara tanto.
Arg, mi Facebook, desde que me lo hice siempre ha estado un poco abandonado, sobre todo últimamente porque por unos motivos o por otros solo me quedaban familiares agregados ya que la poca gente que tenía se han ido esfumando.
Llevo tiempo sin entrar, porque no tenía motivos ni motivación y se me olvidaba entrar para nada, justo cuando ya ni recordaba que tenía un Facebook… de casualidad un enlace me lleva hasta una página de Facebook, y veo que tengo notificaciones pendientes, las leo y había una prima segunda a la que no conozco y con la que no he hablado desde los 12 años (tengo 30), con la que coincidí unos segundos en el funeral de mi abuela hace poco, no le dirigí una sola palabra pero por alguna misteriosa razón me querrá agregar en el Facebook. Seguro que le está enviando invitaciones a todos los que se cruzó en el funeral… porque no le dará para más a la pobre, creerá que la gente quiere relacionarse con todo cristo aunque no te conozcan de nada.
El caso es que me da pereza responder y más aun agregarla para después no volver a entrar más al Facebook tal y cómo he estado haciendo antes de ver su mensaje.

Lo que más odio del Facebook es precisamente eso, te ven en la cuenta de alguien y empieza a agregarte todo quisqui aunque no hayas intercambiado una palabra con ellos en la vida, y yo no soporto los compromisos y la hipocresía de hablar con alguien solo porque tenga un Facebook, cuando llevas toda la vida sin acordarte de esa persona. Me parece muy forzado y es algo que a mí personalmente me daría vergüenza hacer, buscar a alguien en Facebook solo porque un día te lo cruzas en un funeral y pedirle que te abra las puertas de su escaparate sin venir a cuento. Yo no sería capaz de hacer esa tontería, es que no le veo el sentido ni la motivación, salvo que hablásemos de alguien que si me importase, pero en ese caso ya habría intentado localizarle mucho antes. Al parecerme algo ridículo, no puedo evitar sentir cierta vergüenza ajena, sensación de falta del ridículo por parte de los demás.
Yo puedo hacer el ridículo con mis pintas, mis gestos o con muchas otras cosas, pero nunca me da por tener comportamientos tan ridículos con la gente, yo necesito ser sincera y honesta conmigo misma, no entiendo cómo la gente no se siente ridícula haciendo esas cosas.

No me gusta Facebook, ni Twitter y ese tipo de redes sociales, porque son demasiado parecidas a la vida real, pierden la esencia y la magia de la red. No me siento como en otro tipo de “redes sociales” que existían antes de Facebook, como eran los blogs y los journals, los chats, los programas tipo msn, etc… sitios en los que importaba era lo que podías aportar, la cultura, el entretenimiento de calidad, o tu forma de ser o de actuar en la red.
En cambio Facebook no es más que un reflejo fiel de la realidad, es mostrarte tal y como eres y las impresiones y el resultado serán los mismos que relacionándote en la calle. Salvo que solo lo uses para seguir a artistas, cosa que a mí me aburre, ya que eso es como tener sus webs en los favoritos del navegador (algo a lo que estoy más acostumbrada).

Sigo prefiriendo los pocos clásicos que quedan vivos, como los foros, los juegos, etc…