Iniciado por 1974 (Mensaje 551639)

Un día me invitaron a una junta, hace 3 años y un día con exactitud. El terror me invadió apenas leí la invitación, y era el único de mi pueblo (comuna) que no iba nunca a las juntas de los que posteábamos en otro foro, así que dije "si no voy me molestarán de por vida por arrugón", y a pesar del miedo intenso decidí ir. Al final tenía que perder por ambos lados, pero si no iba encima sentí que ni siquiera me hubiese atrevido a nada, en cambio si iba con el sólo hecho de atreverme sería algo positivo (por muy mal que lo haya terminado pasando).

Los nervios me invadieron y tuve que prepararme bastante, a través de mismo ejercicio, ensayando qué era lo que tenía que hacer y decir y todo eso, y hasta bebí alcohol para dejar el nerviosismo. Al final fui ante personas que sólo conocía por Internet, y salí vivo de la situación. Sin embargo, al día siguiente estuve preocupado por las opiniones ajenas, por el miedo al ridículo, a que se burlen de mí o que no me hablaran nunca más por vergüenza ajena. Afortunadamente eso no ocurrió, por lo que me tranquilicé un poco y me animé a seguir juntándome con gente que no conocía en persona (sólo virtualmente), aunque fueron veces contadas con los dedos de una mano (2 veces el 2010, 3 veces el 2011 y 3 veces lo que va de este año) me han servido para estar más tranquilo, aunque 2 veces fueron un completo desastre pero cada vez me importa menos la reputación, y eso es positivo.

Si bien no salgo casi nunca de mi casa, al menos no me horrorizo si me invitan a hacerlo personas que no suelo ver y que sólo las conozco por Internet.