Acabo de leer el hilo sobre cómo presentarse y ahora entiendo, en parte, por qué mi cuenta sigue sin activarse.
En fin, he aquí una pequeña presentación, en serio, que espero que valga.
Soy un joven de entre veinte y treinta años, más cercano a los primeros y, a su vez, más próximos a los veinticinco que a los veinte. Para orientar y que cada cual haga sus cálculos.
Habito el norte de España, pero no en su totalidad, tan sólo en una parte pequeñita, acaso insignificante, agradable en cierto modo, con sus campos, río y aire tal vez más puro que lo que muchos puedan gozar, por desgracia, en nuestros días, pero incómoda en otros sentidos: y es que este lugar sería más grato para mí si mi carácter, primero, y mi entorno más cercano, después, también lo fueran.
Pero aquí estoy, tirando como suele decirse, buscando apoyo a mis largos y mónotonos días la mayor parte del tiempo.
No tengo amigos y las únicas personas cercanas a mí lo son por mero parentesco y vicisitudes de la vida.
Me cuesta profundizar en las relaciones y mi carácter, un tanto excéntrico o fuera de la norma, no facilita las cosas.
Y no considero esto como algo malo o poco deseable en sí mismo, pero lo consigno como hecho informativo y tal vez bastante descriptivo.
Existo pues, entre una complacencia en mi soledad, necesaria e inevitable a un punto, y un enorme anhelo por hallar a alguien con quien vencer, o paliar en cierta manera, el melancólico desasosiego vital que deja la soledad a su paso y con su presencia.
Tras varios intentos frustrados, sigo sin trabajo ( nunca lo he tenido ), no curso estudio alguno, y cada vez parece, por pesimista que pueda parecer, que es más improbable que surja o consiga algo que pueda ayudarme a salir de este atolladero.
A veces vengo a pensar que un muro invencible que mi hado siniestro haya venido a colocar ante mí, se alza constantemente como el obstáculo que me aparta de mis objetivos, mi realización y bienestar psicológico.
Estoy tratando con mi segundo psicólogo, que en breves dejará paso al tercero, viendo su incapacidad y no considero mi caso como fobia social en un sentido amplio, pero este sitio es lo más parecido a mi estado que he encontrado.
Y en momentos y situaciones tales, en medio de nuestra existencia, siempre constituye un cierto consuelo o alivio encontrar a otros semejantes, que si no tales en su totalidad, sí lo son, por lo menos, más que la mayoría.
Y por eso estoy aquí.
Un saludo y a todos.
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