Escrito por Guillermo Giacosa :
Tengo una curiosidad: ¿No está usted harto de que los gringos nos cuenten siempre la misma historia para atacar otros países? ¿No cree que, al menos para mantener cierta credibilidad, deberían renovar sus argumentos? Inventar mentiras más ingeniosas o como mínimo, no tan pueriles.
¿Es posible que después de haberse embarrado hasta el cuello en el pantano iraquí, pretendan ahora atacar Irán con más o menos las mismas estúpidas razones que esgrimieron para sembrar el caos y la destrucción en Irak? ¿No cree usted que es absurdo que la nación que emplea anualmente 500.000 millones de dólares en gastos de Defensa y que se ufana de fabricar armas cada vez más mortíferas, se sienta en peligro porque un país como Irán pretende producir energía nuclear para su desarrollo? (hasta ahora no hay ninguna prueba que tenga otras intenciones y luego de la mentira sobre armas de destrucción masiva en Irak, todo hace pensar que se trata de un nuevo engaño para atropellar al dueño de las segundas reservas mundiales de gas y petróleo). No es absurdo e ilógico, además, que Israel, enemigo de Irán, tenga un sólido arsenal nuclear, sin que Occidente diga esta boca es mía y los iraníes sean condenados por el sólo hecho de realizar pruebas para crear una central nuclear que ellos insisten y la AIEA (Agencia Internacional de la Energía Atómica) no posee evidencias en contrario, sólo tiene finalidad civil. ¿No es absurdo que se acuse a Venezuela de desestabilizar militarmente esta parte del continente porque compra una lanchas patrulleras a España y aviones de reconocimiento y nada se diga de Chile que ha invertido mucho más que los venezolanos en ese rubro. Es, lo menos, exagerado, cuando no ridículo, que quienes han patrocinado las más atroces dictaduras en América Latina ahora digan que Venezuela es "un desafío para la democracia y un peligro en el hemisferio occidental". ¿No resulta curioso que los tres grandes enemigos de los EEUU en la actualidad sean, a la vez, tres de los más grandes poseedores de reservas de petróleo del planeta? ¿Hay alguna relación entre esas políticas y los intereses particulares del petrolero Bush y los socios del mismo ramo que lo acompañan en la Casa Blanca (Cheney), el Pentágono (Rumsfeld) y el Departamento de Estado (Rice)?
¿No está usted harto de recibir lecciones de moral de un país que se zurra en la soberanía de los otros países, que burla el derecho internacional manteniendo prisioneros sin juicio en Guantánamo, torturando en Abu Grahib, ocupando ilegalmente Irak y que, además, es el primer vendedor de armas del planeta y el mayor contaminador del mismo? ¿Permaneceremos en silencio si bombardean Irán? ¿Aparecerán los defensores de estas conductas descabelladas y genocidas para decirnos que todo está bien, que las ayatolas son peligrosas y que si los bombardean al fin y al cabo por algo será? ¿Vendrá alguien a contarnos que son fanáticos y por fanáticos peligrosos, como si los gringos no fueran, a su manera, igualmente fanáticos pero, a la vez, mil veces más peligrosos por su poder de destrucción y por su obsesión de imponerse sin importar cuántas personas mueran? ¿No siente usted vergüenza ante tanto abuso?
Somos la opinión pública, unidos con otras personas del mundo constituimos un poder cuya fuerza moral puede doblegar la prepotencia de estos bárbaros modernos. Ejerzamos ese derecho a la crítica. No es sólo una obligación, es una alternativa de supervivencia.