Yo personalmente no me veo feo. Tampoco considero que sea nada del otro mundo, pero a la hora de ligar no tengo problemas. Quizás el que me viera feo en la adolescencia (y en esta etapa pocos y pocas pueden decir verse guapos, con el acné y las transformaciones consiguientes) ayudó algo a agravar el problema, pero lo que más determinó el trastorno fue la baja autoestima y el modo de vida aislado que llevaba.
El problema muchas veces es más el verse feos que el ser objetivamente feos. De hecho importa mucho la manera en que te enfrentas a tu exterior, la actitud que tienes. Eso determina la aceptación, la indiferencia o el rechazo de los demás. La belleza objetiva es más un factor secundario. A la hora de ligar sí que importa más, pero importan muchas otras cosas (simpatía, don de palabra, etc). Así que no os comáis la cabeza, sois como sois, no podéis cambiarlo. Cuando os aceptéis, podréis vivir con mayor tranquilidad y el exterior os aceptará con mayor facilidad. Al menos así me ha ocurrido personalmente.