Aunque ya me había registrado hacia tiempo, solo por insistencia de mi novio me he decidido entrar a dejar una presentación.
He estado leyendo algunas historias, muy por alto eso es verdad, y creo que hay gente mucho más grave que yo, y otros más parecidos a mi. De todas maneras me agrada saber que hay más gente en mi situacion, que sabe lo que es pasar por esto.
Gracias a mi familia ahora ya me atrevo a salir sola a la calle, a mirarme en el espejo, a hablar con la gente, a ir a tiendas a comprar yo sola, o simplemente preguntarle a alguien algo por la calle sin tener que hacer acopio de esfuerzos.
Aun así hay cosas que todavía me cuestan. De algún modo, de manera consciente soy capaz de controlar mi timidez o fobia, pero aun ahora, si mientras duermo alguien grita, me sobresalto (más de lo normal quiero decir) y sufro ataques de ansiedad. Sé por tanto que lo llevo dentro.
No sé si todos los que han casi superado o superado completamente una fobia sienten este miedo a recaer en ella. Yo veo los días pasados con temor a volver a sentirme así, y a la vez siento la esperanza de haber superado, al menos por un tiempo, esta enfermedad.
Mi causas no están claras. Un sentimiento de inferioridad por mi aspecto que autorechazaba en la adolescencia, y que me llevo a descuidarme y por tanto ser más rechazada aun físicamente. Me refugié en los estudios, sacando muy buenas notas, pero a costa de no salir jamás de casa, lo que ayudó a empeorar mi situación de cara a las relaciones sociales. Por entonces ya sufría ataques de ansiedad, aunque no sabía darles nombre.
Fui al psicólogo, pero no me ayudó, entonces yo misma decidí aplicarme un tratamiento de choque: me fui tres meses a Canadá de intercambio, a un pueblo donde solo yo hablaba español. Me ayudo a conocerme mejor a mi misma, a desarrollar mis habilidades sociales.
A la vuelta en medio del curso académico, suspendí muchas asignaturas, y me ayudo a ver de otra manera los estudios, que hasta entonces eran mi obsesión.
Más tarde, en la facultad, me sentí más libre, pero la situación en mi casa empeoró, mi madre enferma de depresión , mis abuelos muy enfermos...todo se vino encima de forma precipitada y más contundentemente de lo que venía siendo habitual. La muerte, la desesperación en los ojos de los familiares cercanos, que sufrían por cosas que verdaderamente no tenían remedio y durante un tiempo prolongado (unos dos años) me brindó la oportunidad de aprender a relativizarlo todo, a entender que hay cosas más importantes. De la adversidad es de dónde más se aprende, decían los viejos.
¿Y por qué estoy ahora aquí? Durante estos últimos años he sido el pilar de mi familia(todos lo hemos sido, pero yo renuncié a mis "manías" por ellos)y ver sufrir aunque ayuda, también acaba minando el alma, como la gota de agua que pule la piedra, pero que también la horada.
Ahora más que nunca, que las cosas están en calma, puedo sentarme a pensar, a entender todo lo que me ha pasado y aprovecharlo, para que el dolor propio y ajeno que he vivido y sufrido no caiga en balde, y me sirva para aprender más aún.
Espero que vuestras ayuda me facilite el camino, y espero ser de ayuda para todo aquel que me necesite a mi.
Besos a todos. Nos leemos.