Es evidente que los medios escenográficos y propagandísticos del Tercer Reich todavía hoy causan admiración malsana e influyen, a veces perniciosamente, en la mentalidad de jóvenes aún por formar. Es por esto por lo que líderes mediáticos como rockeros, actores o modistos deberían tener mucho cuidado con sus declaraciones a la prensa o publicar a la buena de Dios las colecciones que orgullosamente han atesorado a lo largo del tiempo.
Además, una cosa es tener una colección de Lugers (inutilizadas, claro, y con los permisos necesarios) que, como amante de la técnica de fabricación de tales pistolas, es muy lícito y no implica estar influenciado por la doctrina nazi y otra, muy distinta, es tener en tu hogar todo un baluarte repleto de simbología nazi, prohibida en muchos países, o retratos de jerarcas de la época.
Lo que puede ser muy interesante para los foreros aquí presentes es, sin duda, la aplicación de himnos, marchas y canciones militares (no sólo nazis) para la estimulación de nuestra moral, especialmente en momentos puntuales de mayor dramatismo o tensión. Si funcionó con un soldado temeroso de la muerte en el campo de batalla, ¿por qué no iba a funcionar con un joven lleno de miedos frente a un tribunal o una entrevista de selección?
Un libro que recomiendo encarecidamente para una introducción cronológica de los eventos más importantes sucedidos en la Segunda Guerra Mundial es "El mundo en guerra". Existe una versión en
DVD bastante actual. Sin embargo, el tocho que tenía yo en casa incluía también un par de cintas de cassette (imagináos qué antigüedad tendría) en la que aparecía música de todos los bandos que combatieron en la Segunda Guerra Mundial.
No he encontrado ninguna referencia de ese libro y sus cintas pero la música que incluía, junto a discursos tan manidos y parafraseados como los de Winston Churchill o F. D. Roosevelt, te ponía en el verdadero olimpo de los dioses arios (o te protegía con el manto de la madre patria soviética, según el caso), inyectándote en vena un cóctel neuroquímico profundamente activador.
No resulta fácil desligar el potente carácter dramático de estas notas que movilizaron a millones de seres hacia su propia destrucción y la de sus seres más cercanos (preferiblemente los habitantes del bocage vecino) pero, si por un momento apreciamos la música en su más pura esencia veremos que algunas son piezas realmente bellas.
Adjunto unos enlaces que, aviso, pueden herir la sensibilidad de algunos foreros. Administrar con precaución:
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