Quizá andas todo el día sin hacer nada y es en lo único que piensas, intenta salir, respirar un poco de aire, conversar con algunas personas, departir ideas, la mayoría de veces son nuestros pensamientos los que nos deprimen o nos provocan el estado de ansiedad.
La muerte es inminente, y puede suceder en cualquier momento, es algo que se acepta y con lo que se aprende a vivir, pero concentrarnos en ella, no es de provecho, vuelca tus ideas hacia algo positivo, piensa en como disfrutar los años que pasan viviendo.
NO TE CONCENTRES EN LA MUERTE SINO EN LA VIDA.