Interesante psiche, ya había oido hablar de eso, aunque según entiendo no es solo un asunto de simetría, sino de proporciones. Si fuera solo de simetría uno podría convertir cualquier rostro en uno atractivo si de una foto nos quedáramos con la mitad y con un programa de edición de imágenes invirtiéramos esa mitad y la juntáramos, y ¿nos resulta así automáticamente un rostro de portada? Pues no... Porque el asunto no es solamente de simetría bilateral, sino de proporciones, por ejemplo el tamaño relativo del ancho de la boca en relación al ancho de la nariz, el ancho de los ojos igual a la distancia entre ellos etc. Incluso se utiliza la proporción pitagórica para medirlo, todo eso del rectángulo aúreo, que se haya repetido en innumerables tamaños en los rostros de las estatuas griegas (y en los cuerpos también). Aquí hay algo sobre eso:
Aunque claro, también esa forma de medir el atractivo se basa en un rostro en posición de reposo, pero también hay gestos atractivos y cuando nos comunicamos son nuestros gestos los que trasmiten, teniendo un gran peso más allá de lo que hay en posición de reposo. Incluso, un rostros atractivos con gestos que no son atractivos lo afean completamente, pero al revés también puede ocurrir, ciertos gestos pueden hacer atractivas personas de rostros nada agraciados. Claro, que aquí no entran consideraciones estéticas, sino de personalidad. Después de todo, el atractivo no es solo un asunto de belleza física.