Entre la eritrofobia, aumenta el rubor al darme cuenta,
Súbitas expresiones y burlas contagiadas,
el tiempo, el tiempo se hace eterno,
y el espacio se congela y acelera tu pulso,
una Capilla de risas martilla la psique,
aversión futura hacia la gente,
resentimientos llenos en una cúpula de miedos,
de hastío y saciedad amargas,
Crece y decrece la alegría, pero estalló un universo
lleno de dolor con islas pequeñas de felicidad extraviada
en pequeños burdeles mentales.
Visiones, visiones desde el lado oscura de la mente,
pequeñas luces las acojo en el refugio de mis manos,
la sangre de los inocentes seca la mezclo con los
huesos hechos polvo por el mazo del sarcasmo.
Mantén tus ojos abiertos a tu propio espacio,
tristes y alegres, la balanza en homeostásis interna,
aprende y comprende, búrlate de ellos en el futuro,
con ojos sumisos caerán en humillación,
ellos lo sentirán, que son mas que pobres diablos,
nacidos y como destino la ignorancia.
Con pocas palabras dirás mucho,
pero tu corazón se compadece, pero razón gobierna,
usa sus palabras en su contra,
haz de su cielo su propio infierno,
y lanza flamas disfrazadas de brisa,
desvanécelos como ellos en su naturaleza lo hicieron,
Sé un superhombre ante la muchedumbre,
la timidez al trecho del sarcasmo sólo el puente es
la locura y en la locura el conocer,
analízalos como el cientifico estudia al mandril,
en múltiples facetas que ni en una jornada centúrica
te entenderán.
Golpealos con el mazo de tu sarcasmo,
pasa a la acción en la inacción,
tu comportamiento será tan ácido y difícil de describir,
no serás encontrados en ninguno de los anales
de sus etiquetados compendios,
abstracción y nadamás, dibuja en la paleta de tus sueños
la pintura de tu realización,
Cuando el hierro está caliente,
es cuando más debes golpear,
dale forma al mazo con el que te defenderás.