Hoy he visto a la que, en mis sueños, queria que fuese mi media naranja. Una chica guapa y, al parecer, inteligente, que me despreció como si fuese una bacteria. Ahi estaba masticando su chicle, toda una femme fatal en potencia. Si yo hubiese estado advertido en su momento no hubiese caido en la trampa.
Gracias a ella y a otras más, la busqueda de una media naranja cada vez me parece más una tortura y no algo divertido y excitante. Y dejaron su poso en mi, ahora me resulta cada vez más dificil acercarme a una chica. Me traumatizaron, por asi decirlo. En fin, a pesar de eso sé que soy capaz de mucho... de muchas estupideces... por amor... o por acercarme a una chica que me rechazará con un 99% de posibilidades. Lastima que está siempre ese 1%. Si no, ya lo hubiese dejado hace tiempo.