Hola TempusFugit, a mi la época de fiestas me produce una mezcla de emociones. Por un lado siento que me gustaría estar más integrado con mi familia y tener verdaderos amigos y por otro me produce cierto dolor justamente que me cueste se haga realidad tal cosa.
Pero me gusta ¿por qué? porque ya no me pregunto o cuestiono acerca de esa "aparente falsedad" de la gente que se vuelve solidaria en las fiestas y no lo es el resto del año, tampoco creo que sea que haya una obligación de ser feliz.
Lo veo más bien como una opción. Elegir vivir un buen momento o no, tener esperanzas sobre algo bueno de mi presente y futuro o no.
El extremo raciocinio sobre aquellas conductas de la gente, las costumbres, etc simplemente siento destruyen mi posibilidad de sentirme bien.
Se trata de elegir sobre escudarse a través de una optica analítica teñida de dolor y frustración o ir dejandola de lado y tratar de sentir algo bueno, una emoción positiva.
No te voy a negar que de vez en cuando tengo ciertas salidas donde me pongo criticón con la sociedad y sus maneras de ser o aparentemente de su imposición de conductas, que parecen actuar como manada sin criterio, que todos se ponen como tontos, etc. Pero creo que lo que más importa es hacia donde enfoca la propia mente, pues sólo existe para uno aquello en lo que repara, aquella parte que recorta de la realidad.
Saludos, y espero estés bien.