Creo cada vez con más convicción que todo está en la película mental que nos montamos. Si tenemos pensamientos negativos, dudas, desconfianza hacia nosotros mismos y hacia los demás, es seguro que eso nos va a salir por algún lado, sea sudoración, rubor, tartamudez, nerviosismo, ansiedad, etc...
Por el contrario, si confiamos ciegamente en nosotros, si somos capaces de no exigirnos ser perfectos, si nos amamos incondicionalmente, podremos interactuar con los demás con éxito. La gente no está tan pendiente de lo que hacemos, decimos, qué aspecto tenemos o si somos así o asá. Todo está en nuestra cabeza. Es cuestión de cambiar el chip y ser positivos, aceptando que habrá días mejores que otros, y que esto es normal.No porque un día me sienta triste y desgraciado voy a creerme que mi vida es así. Para nada. Mi vida es mucho más que ese insignificante momento de agobio o inseguridad, he hecho cosas importantes, hay gente a quien le importo mucho, yo soy lo que yo quiera ser.
Bueno, tenía que desahogarme!