Otra vez me descubría a mi mismo con la cara encima de una almohada, quién era, donde estaba, que hacía ahí…, todo volvía a mi una vez mas, como cada día, como cada mañana volvía a recuperar la consciencia de mi mismo.
Como siempre, se que he soñado con algo, pero no consigo recordar mi sueño, cosa que por otro lado no me perturba en lo mas mínimo. Mis supuestos sueños, si bien no me dejan recuerdos, me dejan una mala sensación, quizá es por eso por lo que no los recuerdo, ni lo intento, no soportaría que los sueños fuesen algo tan caótico, frustrante y sin sentido como la realidad, no poder escapar de la realidad ni en los sueños de uno es una idea que de verdad me deprime.
Lo primero que se me viene a la cabeza, como ayer, como antes de ayer, como todos los días desde que la conocí, es “Ella”. Oh que perfecto es todo lo concerniente a "Ella" en mi cabeza, pero como me pasa con todo, hasta en la decadencia, hasta en el sufrimiento, ¡que perfecto es todo siempre en mi cabeza!… Pero como también pasa con todo, una vez que las cosas pasan a ser no solo dominio de mi cabeza, una vez que tienen que salir, ver la luz y enfrentarse al mundo, cuan abrumadora es siempre la realidad.
A “Ella” la conocí hace unos cuantos meses, me la presentó un amigo que tenemos en común, ese día salí de casa solo por que me abrumaba la idea de pasarme todo el día encerrado, no tenía muchas ganas de encontrarme con nadie, pero como siempre la perspectiva de conocer y hablar con alguien que hasta ese entonces me era desconocido, es algo que me inquieta, por mucho que me llegue a molestar el contacto con mis querido congéneres humanos siempre me queda esa pequeña, ilusa esperanza de que el siguiente que conozca merecerá la pena.
Llegue unos minutos tarde y ya me estaban esperando, cuatro personas de las cuales solo conocía a una, saludé a mi amigo y me presentó a los demás. Desde que salí de casa tenía la cabeza en otro mundo, y en el momento de encontrarme con ellos, seguramente pensaba en la última canción que había escuchado antes de quitarme los cascos para saludarles. Ninguna de las personas que encontré enfrente de mi llamaron mi atención de manera negativa ni positiva, cosa que no me sorprendió y simplemente aumento mi desidia y mi desconexión.
continuara…..
http://youtu.be/jicBBk4Sgxs