Buenas, soy Ari, hace tiempo que os leo. Actualmente estoy en proceso de reconstrucción de mi ser, intento abrir mi mente, vivir la vida sin condicionamientos, sentir cada minuto que pasa como si fuera el último, disfrutar de cada paso que doy, respirar lo más profundo que pueda, escuchar todo lo que me dice mi interior.
Pero no ha sido fácil llegar aquí. La tristeza, el miedo, la ira invadía mi vida, me desesperaba, creaba un infierno a mi alrededor, hacía sentir a los demás culpables de mis problemas, criticaba a los demás los defectos que yo también poseía y que intentaba ocultar, quería llevar siempre la razón por el simple hecho de querer estar por encima de los demás y asi poder tapar mi baja autoestima, lloraba en un rincón pensando que mis problemas eran los más importantes del mundo, me alejaba de las personas que creia que me despreciaban cuando era yo realmente quien se despreciaba sin tener ningún motivo real.
Pero sigo siendo la misma, tengo la misma cara, los mismos gustos, pero no tengo las mismas necesidades: no necesito que nadie me de su aprobación en todo; no necesito tener muchos amigos que me hagan sentir que soy especial, todos somos únicos y por eso especiales; no tengo el cuerpo ni la cara perfecta, soy yo y punto, a quien no le guste que mire para otro lado; no necesito que todo esté bajo control y que sea perfecto, las cosas pasan y son como son y punto, quien las pone la etiquetas de buenas o malos somos nosotros; no necesito estar todo el dia malhumorada haciéndome la victima porque asi me hacen más caso, no sabía las cosas que me perdia cuando no se sonrie a la gente.... hasta se hacen amigos.....
De todas formas, este es un viaje largo, cada dia hay que caminar un trozo hasta llegar a la meta. Pero recuerda, el premio no está en la meta sino en el propio camino.
Saludos.