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Buenas a todos!
He leído tu historia, y a medida que iba avanzando las líneas, me me iba viendo más reflejada en ella.
Tengo 27 años y hasta ahora, hace cosa de dos semanas, no he sido capaz de tomar cartas en el asunto e acudir a una psicóloga.
Siempre fui de pequeña una niña muy alegre y risueña, tengo desde los 5 años una hipoacusia (sordera severa) y llevo dos audífonos, pero a la edad de 12 años, cuando cambié de vivienda, colegio y demás, mi mundo empezó a cambiar, me fui convirtiendo en una persona triste, sin ganas de vivir, sin ilusión y con muchos miedos, pero no miedos normales, sino, atroces............miedos que todo el mundo tiene pero elevados a la máxima potencia. Recuerdo haber pedido a mi madre en muchas ocasiones un psicólogo porque no me veía una niña normal, no sabía cómo relacionarme en todas las situaciones sociales, a la hora de hacer amigos, o incluso a la hora de ser asertiva.....lo he pasado francamente mal porque mi vida hasta ahora, ha sido una constante lucha, entre no aceptarme como soy, entre esas ansias por cambiar todos esos desajustes, y tb por sentirme muy incomprendida por parte de mi familia, en especial el apoyo de mi madre siempre me ha faltado, porque nunca ha "entendido" ciertas actitudes mías fóbicas sociales.......uffffff, siempre me han protegido demasiado, me lo han dado todo hecho, y la verdad es que, llegó un momento que con 25 años, me daba miedo todo, ir a comprar, ir a centros comerciales, lugares donde había demasiada gente y lo peor, comer en público, ir a reuniones familiares, evitaba este tipo de cosas , no podía trabajar, me daba vergüenza y lo que es peor, fobia, todo, salir a la calle...........
Hasta que , no sé si fue el destino o algo en lo que necesitamos creer para sobrevivir, pero yo un día entré en una iglesia y le pedí a Dios y a un santo del que soy muy devota, que me ayudara, que no podía más, q estaba rozando mi límite, necesitaba un giro en mi vida bastante grande, me había quedado sin amigos, evitaba comer en público en cualquier situación, incluso con la familia, porque me generaba mucha ansiedad, en fin, todo cuesta abajo.....y por aquella época, conocí a un chico que era amigo mío desde hace años, pero sólo nos comunicábamos por teléfono, él era la persona a la q le contaba todos mis miedos, mis ionquietudes y mis problemas, me ayudaba, me escuchaba, y aunque a veces, no entendiera, pero siempre me apoyaba, por las cosas que hablábamos y por cómo congeniábamos, me iba enamorando de su forma de ser, es como si.........lo conociese de toda la vida, como si fuera mi otra mitad......hasta q dimos el paso, pasado un tiempo, de conocernos personalmente y la cosa fue bien...
Él también tiene una minusvalía y eso nos unió más aún, nos entendemos perfectamente y es como si, fuera la mitad que me faltaba. Bueno, pues llevo 3 años viviendo muy lejos de mi casa, de mi ciudad y de mi familia, vivo con él, somos muy felices juntos, al menos de momento y nos compenetramos bastante bien.
Y ahora, he tomado la decisión, hace escasas semanas, de acudir a una psicóloga, eso que tantas veces he pedido a mi familia, y q nunca han comprendido, q yo lo necesitara, porque sus respeustas siempre eran: "anda no digas tonterías", "tú lo q necesitas es espabilar", y ahora, estoy yendo a terapia, de momento, el simple hecho de contarle todo lo q me ocurre a una persona desconocida, me libera bastante, no sé si estos desajustes q llevo arrastrando tantos años tendrán solución, pero sí deciros algo q estoy aprendiendo, es a controlar mi mente y no q ella me controle a mí, "reeducarla", cada día dando pequeños pasitos, no hay q tener prisa, es pasito a pasito pequeño, un día saliendo a la esquina de la calle, otro más abajo, otro al cajero, y otro a la entrada del súper y q tu cerebro vaya aprendiendo eso, sé que es difícil, a mí me cuesta horrores, pero aconsejo a todo el mundo q tenga mucha fe, q pongan voluntad porque sin eso, esta vida no tendría sentido, no perdáis la esperanza, porque yo aún no la pierdo y sé que todo tiene solución, y si uno tiende a tener ese carácter, en el q somos más tímidos, tendremos q aprender a querernos y tener un clima de naturalidad frente a las situaciones.
Bueno, espero no haberme enrollado mucho.
besos
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