Muchas gracias, cloision, por la bienvenida. Espero encontrar ese sitio, pero creo que en realidad si uno no se siente bien consigo mismo no podrá hacerlo en ninguna parte. En estos días, estoy tratando de superarme y de salir todos los días fuera de mi casa, aunque te aseguro que me cuesta mucho y creo que estoy sintiendo eso que llaman “ansiedad anticipatoria”. Por otra parte, ayer festejé mi cumpleaños y la verdad que salió todo muy bien, aunque claro vinieron mis mejores amigas/os del colegio y de la facultad.
En cuanto a hacerme respetar, es paradójico en mi caso. Algunas personas que me conocen y no precisamente mis familiares o amigos, sino conocidos o gente de mi antiguo trabajo siempre comentaban que yo tenía carácter fuerte, debido a que era uno de los pocos empleados que hablaban con los jefes de igual a igual y que salía a defender al resto de los compañeros, especialmente a los más jóvenes, con quienes más me identificaba. Mi problema era que no decía las cosas que me molestan o que jamás pedía nada para mí, pero en cuestiones laborales o puntos de vista siempre defendí mi posición o exponía con firmeza aquello que debía hacerse, por más que mis jefes me pusieran mala cara o me quisieran imponer su criterio. Es más una vez me mandaron a callar por más que tuviera razón, porque si o si había que darle la razón al jefe máximo.
En mi antiguo trabajo, la línea jerárquica estaba totalmente marcada y era sumamente verticalista. El jefe máximo y otros de otras divisiones estaban como allá arriba, era casi imposible acceder a ellos y si bien casi no trataban con los empleados comunes sino con sus pares, los demás jefes, a mi me trataban bien, es más hasta me llamaban por mi nombre de pila, cosa poco común en ese sitio, ya que prácticamente ni sabían los nombres de los otros seis abogados que ingresaron conmigo. Incluso uno de mis jefes (abogado), se asombraba de la forma en que me trataban y pensaba que yo los conocía de otra parte.
No sé si a alguien le sirva esto que cuento, pero estuve leyendo que las personas con fobia social tienen problemas para tratar con personas con autoridad. En mi caso, mi estrategia para enfrentar este tipo de situaciones en la siguiente. Yo creo que las personas que tienen poder o mucha autoridad es un determinado ámbito no soportan a la gente que se arrastra y les dice todo que si a costa de cualquier cosa para quedar bien con ellas, aunque quizás esas sean las que luego ascienden, je. En mi ámbito de trabajo, esto era muy común. Yo siempre trate de ser respetuosa, de colaborar, pero no dejarme intimidar ni ser una arrastrada con mi jefe. La verdad es que si bien no me gane su simpatía, si su respeto, aunque ellos se enojaron y resintieron conmigo cuando renuncié.
|