Ferdinand Bardamu

Hola amigos, todos, señoras, señores, niños y niñas. Mi historia del domingo presente es la siguiente:
He de entregar un trabajo con tope de fecha hoy, a las 12 de la noche, hora de fobiquitos licántropos y charangas carnavaleras. El trabajo, inscrito en la metodología new age de hippismo y esfuerzos comunales, he tenido que distribuirlo con otra persona. En principio los grupos eran de tres, hasta cuatro, pero yo, fantasma de mi facultad por antonomasia, y mi compañero, que está a verlas venir, nos hemos quedado solos y hemos tenido que asumir un trabajo muy denso entre los dos. Un buen día de esta semana pasada, quedamos. Pŕovido de mí, que había ojeado por encima el conjunto del trabajo y la dificultad de éste (pues versa sobre una tecnología caduca de principios de los 90 y sobre la que apenas hay documentación) me apiadé de mi compañero y el reparto de la carga de trabajo fue como un 90% para mí y el diez restante para él; generosa de esta manera es mi alma, que lo que tiene de bondadosa lo tiene de subnormal. Él dijo Vale, yo me ocupo de eso. Sin atisbo por su parte de reparto poco equitativo. Yo esperaba, si cabe, un ofrecimiento diligente por su parte, algo como Déjame a mí un 20 y tú haces el 80%; pero cómo va a decir eso. La gente no es imbécil. Hasta tal punto llega mi compañerismo que le dije Toma, mira en estas fuentes, léetelas, no sé. De manera que yo he estado varios días buceando en libros e hilando información en desuso, con fuentes contradictorias y obviamente nada en lengua cervantina. Termino esta tarde, qué bien, qué aire reconfortante cuando se realiza un trabajo. Me llega, al tanto, un mensaje de mi compañero. Dice Toma, ahí tienes lo mío. Miro lo suyo y se trata de un corta pega de las fuentes que le pasé, sin siquiera reparar en unificar fuentes, eliminar hipervínculos, etc. Un pisto de información que no puedo integrar en mi parte del trabajo, porque no entiendo nada. Él dudo que aparezca en lo que resta de día. Me toca a mí la maquetación y la entrega. Es a las doce de la noche.

Jejeje qué gran etapa de nuestras vidas, la universidad.

Oxymoron

traviss

y xk no le llamas y le cuentas tu situacion? supongo k el estara ahora en prena fiesta carnavalera y tu en tu cuarto con el ordenador encendedido con un cabreo y un estres de la hostia no? x cierto en la uni siempre hay vagos y trabajadores y los competentes son los k suelen llegar al master, los demas si esk llegan a terminar el grado lo hacen con 5 . otra cosa, xk decidistes kedarte con el 90%? si de verdad no tenias mucha confianza con el haberle dado la mitad y luego lo juntais como se pueda, tampoco te vallas a pensar k los demas lo van a entregar muy bien xk si tienen las mismas pachorras k tu compañero van apañados.
suerte y recuerda, siempre kedara septiembre o junio

Res_funciona

Yo llegué a presenciar gritos y peleas llegando a las manos, hasta exposiciones orales en las que los integrantes del grupo ni se hablaban.

alvarete

Pues que le den por culo a tu compañero, pon que tu eres el unico que lo ha realizado ya que es esa la verdad.

LOU SPIN

Pero leche!!!
¿No me jodas que las facultades ahora abren los Domingos a las 12 de la noche?:-o
Pues ya es amor al arte; en mi época ni entre semana cerraban más allá de las ocho de la tarde, porque el bedel tenía que irse a casa a merendar y tal.
Por cierto, alguna vez habrá que hacer un homenaje al corta-pega; ese fiel amigo del mal estudiante.

Sonambula

Hola, ¿Qué estudias?. Ah, suerte.

Ferdinand Bardamu

Bueno, ya está bien. Quiero decir, que yo no posteo aquí de forma relamida y execrando de éste o del otro. Yo llevo seis años, serán siete si no ocho, para sacarme una ingeniería técnica de tres. Me refiero a que soy una víctima del sistema, no un estudiante modelo, ni alguien que hable con jactancia del abandono y la pasividad de un compañero. Lo de hoy es algo que sintetiza mi andadura académica, nada más. Soy un ser extraño entre iguales, un pez fuera del agua. No se trata de faltarme picardía, mala sangre, qué sé yo. Es una desidia inercial hacia la nada. Se me pide la luna, y yo la bajo. Soy capaz de eso, y más. He macerado algo que ni por asomo parecía poder ser practicable, y el trabajo hecho está. Y sin embargo, sigo estancado, y todos avanzan menos yo, que me rezago y me hundo en un fango demasiado familiar. Es luchar contra los elementos.

Son días extraños, estos.

Raist

¿Pero si tu mismo eres el que le ha ofrecio las cosas en bandeja de plata y le has dicho:"te dejo el 0%", por qué te quejas? Siempre está en tu mano repartirlo mejor y decir:"mira yo hago esto y tu haces lo otro". ¿Que no hace su parte? Siempre te queda la bonita opción de hablar con el profesor y comentarle que el trabajo lo has hecho tu entero .

ashe25

Se ha aprovechado de ti y tú, en tu desidia, en tú desgana, le has permitido hacerlo. Y lo que es peor, lo sabes. Pues bueno, has terminado el trabajo y mañana es lunes. Estás un paso más cerca, digo yo.