Pues si. Estoy harto de ser tan poca cosa.
Me preocupo por todo, me rallo por todo. Hago una montaña de cualquier grano de arena.
Todo me da verguenza. Apenas me atrevo a hablar con nadie.
No soporto las situaciones embarazosas. Cualquier situación en la que note que he hecho el ridículo o he quedado mal, se repite obsesivamente en mi cerebro una y otra vez, haciéndome sentir mil veces esa misma verguenza.
Ni siquiera soporto ver situaciones embarazosas en televisión. Cuando veo a alguien haciendo el ridículo, me siento incómodo como si me estuviera pasando a mi.
Hoy unas chicas me han pedido que les indicase una dirección. Me he puesto tan nervioso por querer responder rápido, bien y de una forma sencilla, que las he terminado mandando donde no era. Ahora no puedo parar de darle vueltas al asunto y me las imagino repitiendo continuamente "hemos ido a preguntarle al tonto del pueblo, mira donde nos ha mandado".
Encima me falta agilidad mental, cuando alguien me vacila me quedo bloqueado, y para cuando me pienso la respuesta apropiada ya se ha marchado, por lo que siempre acabo pareciendo idiota.
Además, me da miedo la violencia, por lo que aunque se me ocurra una buena respuesta me la callo, por miedo al enfrentamiento.
Además, soy maniático y obsesivo con el orden. Me paso montones de horas ordenando o reordenando mis libros, comics, videojuegos o películas... por tamaños, por fecha de adquisión, por géneros... En la nevera guardo los yogures o bebidas con la etiqueta siempre para fuera, vigilando que nunca un producto se toque con otro y colocados de forma simétrica. En el trabajo siempre tengo que tener todo ordenado. En una pila de papeles nunca puede sobresalir ninguno, el material de oficina siempre en el mismo sitio, de forma simétrica y sin que se toquen (por ejemplo un bolígrafo no puede tocarse con una grapadora). Siempre tengo que tener un repuesto para todo: Si estoy gastando un paquete de rollos de papel higiénico tengo que tener otro de repuesto guardado, si solo tengo el paquete abierto y ningún otro de recambio, eso me genera estres. Lo mismo para el detergente, jabón, champú, etc...
Encima, el hecho de ser tan nervioso ha hecho que desde hace tiempo tenga incontinencia urinaria y frecuentes diarreas, lo que me crea todavía mucha más inseguridad y miedo a salir.
En fin, a veces no entiendo de que me sirve estar en este mundo, si lo único que hago es sufrir y preocuparme por todo.