almasolitaria

Ay pues por fin voy a tomar el gran paso, que miedo

Pero ya la situación es insostenible.
Antes fui vía urgencias y a un dentista para que me calmara el flemón y el dolor.

Pero resulta que necesito un par de implantes por un par de muelas que no se pueden salvar y tengo que buscar un dentista que no conozco, ya que al que va mi familia no hace implantes.
Ahora tengo que ir donde uno que nunca he visto y que vea el cuadro de mi boca.

Lo estoy pasando fatal, casi llevo peor esto que el dineral que me voy a dejar...

Intento pensar que es un profesional que habrá visto de todo, etc. y que trabaja por dinero, y es una relación profesional paciente pero me cuesta horrores.
Encima ahora no tendré que ir a un dentista, sino a más para ver a cual elijo y me puede hacer el tratamiento, no quería dentista pues ahora toma dos tazas, tengo que dejar que me miren varios

Como en todo es fácil decirlo pero ahí va mi consejo a quien esté pasando lo que pasé yo.
Afrontar e ir al dentista porque yo al final voy a tener que ir después de no ir otras veces atiborrándome a medicamentos, dañando mi estómago y ahora me tendré que dejar dinero y un tratamiento más doloroso. Al final llegará un momento en el que la situación es insostenible y habrá que ir.
A mi también me decían que fuera y siempre alargando la situación. En fin, aprender de mi error

IronMaiden

100% de acuerdo.
Aunque cueste mucho dar el paso, es mejor soportar el dolor de una intervención o tratamiento durante unos minutos (o segundos), que sufrirlo constantemente por tiempo indefinido.

Sobre el dolor, recuerdo que de pequeño me extrajeron una muela...golpeé, grite y pataleé como un poseso (como este icono: , pero sin reírme :S)...pero, la verdad es que me dolió más la anestesia (el pinchazo lo aguante bastante bien) que la extracción de la muela. De hecho, la extracción ni la sentí...pero el hecho de ver el instrumental, el sonido y el sentir como el dentista tiraba de la pieza hizo que me transformara en Linda Blair

De adulto, solo he vuelto un par de veces; y tanto la eliminación de placa como la colocación de empastes -ambos procedimientos sin anestesia- me resultaron más "dolorosos" o molestos que la extracción de aquella muela.

Con la anestesia no sentirás nada. Después de aplicada, lo más molesto es el tener que estar tumbado con la boca abierta, el sentir el metal de los instrumentos y el ruido de las obras; pero, dolor: ninguno (hablo por mi experiencia personal, de familiares y de allegados, jeje). Piensa que una vez termine el procedimiento, te habrás quitado un gran peso de encima (tanto físico como psicológico).

Fuerza y ánimo!!

dadodebaja27072

Sí, también me pasa, me cuesta mucho enfrentarme a esa, o situaciones similares con gente que siento cerca, no me gusta nada. Es que se enfocan en uno, eso a los fóbicos nos resulta bastante agobiante.
Si a esto le sumamos que también tengo fobia a firmar delante de la gente, a hablar y que me miren, resulta no ser una de mis situaciones preferidas. La verdad tengo días más fuertes, pero esos que son marcados en el calendario me resultan bastante duros, casi siempre los evito, incluso con dolor de muelas.

Pues ánimo, que mejores pronto en todos los sentidos.

almasolitaria

Pues no se que decirte porque la última vez que fui el dentista me echó una bronca terrible por el estado de mi boca y me trató bastante mal. Tanto que me saco la muela que me dolía y no he vuelto y tengo mucho que tratarme.
Estoy buscando dentista nuevo, que entiendo que me diga que me cuide y me de cierta reprimenda por mi bien pero eso ya lo se yo, no me tiene que tratar como a una criminal chillándome casi en medio de la consulta ante todos.

Yo también estoy en una situación similar... además de pequeña me pusieron un par de empastes sin anestesia por unas complicaciones y vi las estrellas. Indescriptible el dolor.
Y como tengo algo de sinusitis cuando me tumbo y me están tratando tengo momentos de asfixia y eso a su vez me provoca más ansiedad, no respiro bien en esa posición.

El médico general no me gusta tampoco. Yo suelo ir cuando tengo fiebre y antes apenas iba, ahora como trabajo si lo que tengo me viene mal obviamente voy por lo de la baja.
Pero por lo menos es un médico con el que llevo años y como mucho he tenido catarros, tuve una bronquitis una vez y cosas así. No me he tenido que desnudar creo que nunca, ni nada de eso.

Por ejemplo yo no voy al ginecólogo y eso que tengo ya unos años... me da una vergüenza terrible.
Ahora dentista y ginecólogo porque a partir de los 30 hay que revisarse porque aumenta el riesgo de cáncer.
Que envidia me dan los tíos en ese aspecto, ellos tienen lo de la prostata pero hasta cierta edad no pasa nada si no van.
Yo en cambio tengo que ir a abrirme de piernas con un desconocido. Definitivamente esto sí que me da más vergüenza que el dentista.

Peores bocas que la mía a mi edad, tampoco muchas.
Es un tema que me supera. Pero me he decidido finalmente a coger el toro por los cuernos.
Espero no rajarme cuando llegue a la puerta de la consulta, que no sería la primera vez.