Para mi es normal pensar en la muerte.
Creo que no hay día de mi vida en el que, por lo menos por 1 segundo, no haya deseado estar muerta.
Bueno, no soy un buen ejemplo de todas formas u.u a los 15 años tuve una intoxicación con tranquilizantes (alprazolam) que me dejó en el hospital, unos años después tuve un "intento fallido"
que no será fácil de olvidar, ya que ahí esta doña cicatriz para recordarlo >_< y para colmo, me autolesiono...