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Murió de un apro cardiaco, delante mía, no pude hacer nada, los médicos tampoco, intentaron reanimarle, murió, llegó cadáver, le vi descompuesto, babando, muriéndose, de golpe, de horas antes estar jugando tranquilamente y reirse de nosotras por no haber podido ir a los fuegos por la lluvia a irse y saber que nunca más le volveré a ver.

¿Y si hubiera estado otra persona y no yo?¿Habría sobrevivido?

Que asco todo, en serio.

Enrique1827

Mi madre murio y yo no estuve alli, ademas se que murio sufriendo. Me pregunto si hubiera podido hacer algo. En esto no hay solucion ni final feliz, solo aceptacion. Yo estuve en un caso opuesto al tuyo y todavia me como la cabeza despues de 2 anos.

wiholi

Hola, es muy trágica y durísima la situación que habéis vivido los dos. Los remordimientos siempre surgen, pero es imposible evitar la muerte, cuando toca no hay escapatoria. Es normal, pensar en cosas que se podían realizar para que el final no hubiese sido ese, porque es duro asumirlo y siempre queda esa duda de en otro caso podía no haber sucedido...nunca lo sabremos. Mi consejo es desahogarse llorado, hablando... y no dejar ese dolor dentro, esperar que el tiempo mitigue dicho dolor, no lo quita del todo, pero si te hace seguir adelante en la vida. Un saludo.

Pd: si necesitas hablar escríbeme.

Jorge28

Lo siento mucho. Creo que es imposible imaginarse una situación peor. Culparse no sirve de nada, solo que aceptarlo, aunque claro, es fácil decirlo.

GARAITEZIN

No os torturéis por eso. Mucha más gente de la que creéis tiene muertes que suceden repentinamente o en modos que no permiten acción ni despedida alguna. Muchísimas. Una persona tiene 24 horas al día para morirse en cualquier momento. Y muchas de esas horas puede pasarlas en un instante en el que no hay nadie cerca o es difícil reaccionar. Pasa conduciendo un coche, dándose una ducha, cuando aún no ha llegado nadie a casa, en el trabajo, mientras duerme, cuando sale a correr o pasear, donde sea.

Experiencia propia y casos conocidos, muchísimos.

No conviene obsesionarse pensando en ello, pero tampoco creer que ocurrido algo no normal y minoritario.

Nos han vendido demasiado la idea de la muerte como una reunión familiar completa, con una despedida. Es una falsa impresión.

Se hace lo que se puede cuando se puede. Seguro.

Lo siento. Ánimo.

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