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Mi opinión, desde mis pocos (pero constantes) intentos de escritura es hechar mano de lo que se tenga cerca.
Si las experiencias sociales no son muchas, puedes pensar en escribir cuentos (o novelas) sicológicos, donde los personajes estan metidos en sí mismos, y todo se plantea desde esa perspectiva.
Si eres un buen observador, notarás que en la calle hay muchas historias que se pueden tomar: conversaciones, llamadas telefónicas, peleas, estúpidas parejas sentadas en los parques, etc.
Si la imaginación te lleva lejos, puedes embarcarte en las historias de fantasía o de ficción... ahí puede ayudarte mucho lo pesimista/fatalista/resentido que seas.
Si la sensibilidad es tu "fuerte" puedes irte por temas fuertes, dramáticos, existencialistas.
En fin, lo que si es importante son tres consejos:
1. Leer, así sea poco, pero relacionado con el tema que quieras escribir, eso abre muchas puertas a la hora de sentarse a escribir.
2. No dejar de escribir, así uno sienta que lo que escribe tiene "poco" valor... en últimas lo que te va a ayudar a escribir bien es precisamente <escribir>
3. No dejarse influenciar por las ideas que existen en torno de los escritores y de las pautas para tener una novela "exitosa"... hay que ir poco a poco, escribiendo cosas, buscando una forma de mostrarlas, de recibir retroalimentación de què tan bien vas, de cual es la falla.
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