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Para, para, la vida es un asquito si te pones a analizarla, es mejor no darle vueltas, sobre todo ponerse en lo peor, además no siempre se cumple, no cedas a la ansiedad anticipatoria.
Busca, hay pequeñas cosas que nos pueden hacer más aceptable e incluso agradable la vida.
Puedes empezar por hacer dos listas de cosas: las que te agradan o agradarían y las que no. Ya sé, ya sé, nos da pereza ponernos tareas, pero no tiene que ser un trabajo ímprobo, tómatelo con relax, hoy un poco mañana más, o no, pasado...
Cuando tengas la lista delante empieza por una de las cosas apuntadas y piensa en los pasos que darías para conseguirla si es de las agradables, o para evitarla si es de las desagradables.
Poco a poco ponte en marcha, primero por cosas pequeñas que no te supongan mucho esfuerzo, como ir a sacar un café a la máquina, o ir a comprarte un helado. Deleitate en el placer de haberlo conseguido, no pases al siguiente punto sin haber completado el anterior.
Hoy una, mañana otra. Al final ve tachando lo que vas consiguiendo, y repitiendo lo que te ha ido bien. Deja el futuro para mañana.
Agárrate a lo que puedes hacer y desecha las ideas imposibles o inalcanzables salvo que pasito a pasito te acerques a ellas.
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