Llevo desde los 8 años sin tener un puto amigo, y ya tengo 22. Voy al psicólogo desde los 15 y al psiquiatra desde los 16. He estado en un hospital de día y en una clínica especializada en trastornos de la personalidad. Y, en todo este tiempo, ¿qué ha cambiado? Pero, ¿QUÉ COÑO HA CAMBIADO?
Me dijeron que me apuntara a una actividad para relacionarme. Bien, ya lo he hecho, estoy en un gimnasio desde marzo. Y un gimnasio muy bien elegido, se respira muy buen rollo, la gente es muy maja, sociabilizan entre ellos, hasta los entrenadores se dignan a mezclarse con el gentío... y ahí estoy yo, separado por un muro invisible, como siempre. Sé que me ven antipático, la única persona que no se relaciona con nadie. Pero yo quiero, leñe.
Siempre que leo algo sobre relaciones sociales, dicen que seas tú mismo. Vale, es que yo soy yo mismo, ¿dónde están los resultados? Joder, que he pasado casi cuatro años sin salir de casa, que casi todas mis experiencias en este tiempo han estado relacionadas con el mundo de la psiquiatría, ¿de qué voy a hablar con la gente, si no he tenido vida?
Tengo a mi familia, es cierto, pero no me siento mejor por ello, coño, que tengo 22 años, que aspiro a mucho más. Sé que está mal decirlo, pero la he cogido asco, porque es todo lo que tengo, porque no soy un niño pequeño. También estoy harto de relacionarme solo por internet, esto no me parece vida.
Nunca he cogido una borrachera, ni he tenido pareja, he follado y gratis (con cincuentones, eso sí), pero aún no sé lo que es un beso. Jamás en mi **** vida he salido por ahí con mis amigos, el móvil está muerto de risa. Cuando veo una película me pongo triste, porque hasta la vida más miserable tiene más suerte que yo. Ya no me sirve la excusa de que no hago nada para que las cosas cambien, porque sí lo hago, voy al gimnasio y voy a retomar mis estudios, salgo de casa, pero no consigo romper el muro, la gente me da un miedo atroz, y nadie me da la oportunidad de romperlo, esperan que lo haga yo, ¡y no tengo ni puñetera idea de dónde está el punto más débil de la muralla!
Y me da muchísima rabia cuando alguien me dice que casi todo el mundo está solo la mayor parte del tiempo, o que estar solo no es tan malo, que es peor morirse de hambre. Es que, por lo visto, ellos se han cortado un poquitín con un cuchillo mientras pelaban patatas, y se creen que saben como se sienten los que han perdido la mano. Confunden estar solo con sentirse solo, y no es lo mismo en absoluto.
Joder, si lo gracioso es que sé cómo empezar una conversación, sé que ciertos gestos son señales de afecto, sé que en teoría es terriblemente fácil socializar... Y, cuando lo quiero poner en práctica, me entra más pánico que si estuviera frente a una manada de lobos. ¿Qué tengo que hacer, me tiro al suelo, en medio del gimnasio, y me pongo a llorar suplicando que, por favor, se acerquen a mí, que no soy tan malo, que sólo quiero una oportunidad?
Para más inri, vivo en un puto pueblo aislado, sin tener posibilidades de hacer vida social fuera de él, ni de matar la soledad yendo al cine, por ejemplo.
Me pregunto para qué malgasto tanto tiempo en terapias inútiles si, a la hora de la verdad, no sirven para nada.