Estoy ya, a estas alturas después de 1 año de conocerla, enamorado de una chica. Y es terrible, horroroso; no deseo a nadie con una fobia social acusada el enamorarse. Es la peor tortura habida y por haber. Durante este año he pasado por todas las fases del enamoramiento menos la última, la culminación. Nos conocimos, y de primeras ya me atrajo físicamente. Luego empezó a gustarme su personalidad, sus gustos, aficiones, parecía que teníamos mucho que compartir; conforme más la conocía más me gustaba, hasta que finalmente me enamoré. Todo esto sería una vivencia normal si no fuera por cómo esta vivencia está totalmente deformada por la fobia social. Pues debido a esta tara, no me atrevo jamás a más. No me atrevo a enviarle un sms (¿llamarla? jaja), ni hablarle por el messenger, ni a proponerle algún plan aunque sea con más amigos. Sólo he conseguido ir conociéndola cuando nuestra conversación está mezclada con la de más gente (es decir, hablando entre un grupo); no me atrevo nunca a tener una conversación a solas, y si por alguna casualidad hemos estado a solas no he llegado siquiera a balbucear ni un sólo monosílabo.
Luego por otra parte está el hecho de que parece ser que también es un poco tímida (según me contaron sus amigos y según yo mismo he ido descubriendo), por lo que sus señales de interés hacia mí se me antojan insatisfactorias siempre, es decir, estoy pasando por una situación de amor no correspondido sin saber aún si efectivamente es no correspondido. Siempre parece que me dé una de cal y otra arena, ya que unas veces parece que sí que le gusto y otras veces me deja hundido porque parece que se desentienda. Y encima hay otro handicap y es que debido a mi situación de fobia social (y por ello no conseguir a mis 26 años lo que muchos a mi edad ya tienen: coche, acabar la carrera, trabajo estable e incluso algunos hasta casa propia) y de inexperiencia con las mujeres no sé si estoy preparado para una relación, con lo que cuando veo que ella parece querer algo, me acojono vivo pensando en cómo me conozca realmente va a pensar que soy una lacra y una rémora. En definitiva, sin atreverme a nada y sabiendo lo ridículo que sería para mí mantener una relación con ella, no puedo evitar el que me guste y el que me haya enamorado de ella. Algunos me dirán que primero ordene mi situación antes de empezar nada, bien, ¿pero qué hago de mientras? ¿desenamorarme? Imposible, yo a mis sentimientos les quiero dar un sentido, tampoco quiero que sean en vano, y además es una chica del mismo grupo de amigos así que la veré quiera o no (pero quiero verla, por dios, ¡y tanto que quiero! ¿es que por lo mismo de siempre voy a tener que negar y tragarme mis sentimientos?).
Por dios, esto es una tortura.... Ojalá tuviera esa valentía que tienen algunos
