Ciertamente tierno y triste a la vez. Seguro que más de uno hemos vivido esa circunstancia en la que no fuimos capaces de decirle nada a quién nos gustaba. Quién sabe, quizá fue mejor así... o no.
me hubiese gustado que en vez de una mujer el protagonista fuese un hombre y que al final ese hombre se hubiese enterado que la mujer de la que estaba enamorado sentia tambien atraccion por él.