Hace poco leí en un libro de E. Punset que el origen de las fobias está en miedos ancestrales que arrastramos, probablemente en nuestros genes, de los tiempos en que vivíamos en las cavernas y en medios naturales. Hay que tener en cuenta que el hombre y sus antecesores han vivido en ese tipo de entornos durante decenase incluso cientos de miles de años. Mientras que la vida en grandes civilizaciones avanzadas ha tenido lugar en un lapsus de tiempo bastante menor y posterior, apenas unos pocos miles de años. Esas fobias nos ayudaban a sobrevivir y aunque ahora ya no tengan sentido, siguen ahí presentes.
Hay un miedo de ser rechazados por el grupo, a sentir que no se forma parte de él y que puede llegar a causar una gran angustia. De hecho la necesidad de aceptación social es algo a la que casi nadie escapamos. Porque en las primeras sociedades primitivas ser expulsado del grupo era una condena a muerte segura, ya que era imposible sobrevivir uno solo. Y hay pruebas de que esta práctica del destierro se hacía. Cosa que sigue sucediendo en tribus primitivas de África y otros continentes. Al parecer, incluso en nuestra sociedad actual, tenemos ese miedo ancestral muy presente todavía. Y creo que este miedo puede estar detrás de la angustia que produce la fobia social.
Para quien no crea que esta inlfuencia es tan importante, pensad que hay muchos miedos ancestrales que aún arrastramos, por ejemplo el miedo a los bichos, arañas, serpientes, las alturas etc... La mayoría de las fobias y miedos más comunes que tiene la gente, son a estas cosas porque eran los peligros a los que nos enfrentábamos en el pasado. Una picadura de un insecto africano, o caer de un precipicio nos podía matar. Es curiosa la violencia y la ansiedad con que puede llegar a reaccionar la gente frente a estas cosas.
Pero nadie tiene miedo a un electrodoméstico, a un enchufe, a una instalación eléctrica defectuosa, a cruzar una calle , a saltarse un semáforo, a viajar en coche bebido etc... a pesar de que la probabilidad de muerte de estas acciones es muchísimo más elevada a la de encontrarse a una feliz, inocente e inofensiva cucaracha en la cocina :rolleyes:
En fins, los humans semos ansí de complicaos