Los ultima semana ha sido bastante mala, tan solo una breve muestra de lo que viene despues de semana santa pero hace unos dias entré en pánico. Resulta que un amigo hizo una cita por mi con un terapeuta, era inmediato para el momento que me dijo, y aunque asistir a terapia es algo que he querido hacer por años nunca me atreví, siempre encontraba excusas para no ir: el tiempo, el tipo de terapia, la especialidad del terapeuta, si es hombre, si es mujer, el lugar, etc.
Pensé que era su decisión el que yo fuera y como me gusta llevar la contraria pues no quería ir, punto. No era algo que yo había decidido sino él y me angustiaba el por qué de repente él quería que yo fuera así no más.
En ese momento yo ni siquiera podía decirle que no, estaba paralizada, asustada, mareada, no podía respirar bien, solo hacía gestos y me reía de vez en cuando como restandole importancia a todo. Por supuesto él intentó calmarme y hacerme entender lo obvio pero no hubo forma de que yo fuera hasta aquel lugar. Después analicé un poco lo que había pasado y me convencí que me da miedo ir por exponerme a que esa persona me diga que algo de verdad está mal conmigo, que ese tema que me pone nerviosa e incomoda esté relacionada con algo de mi pasado, la posibilidad que un evento de hace tantos años sea común de la familia, que mi tendencia a la evitación solo va a empeorar con el tiempo o que sea de esas personas que pasan la mitad de sus vidas en terapia y no resuelven nada, que se yo, un montón de cosas pueden pasar... simplemente espero lo peor de su análisis y lo peor de mi comportamiento.
No me estoy sintiendo muy bien.