Al igual que todos los medicamentos, Risperidona Aphar puede producir efectos secundarios, aunque no todas las personas los sufran.
Muy frecuentes: afectan a más de 1 de cada 10 personas
Frecuentes: afectan a entre 1 y 10 de cada 100 personas
Poco frecuentes: afectan a entre 1 y 10 de cada 1000 personas
Raros: afectan a entre 1 y 10 de cada 10.000 personas
Muy raros: afectan a menos de 1 de cada 10.000 personas
Desconocidos: la frecuencia no puede estimarse a partir de los datos disponibles
Pueden aparecer los siguientes efectos secundarios:
Muy frecuentes (afectan a más de 1 de cada 10 personas)
• Parkinsonismo. Es un término médico que incluye varios síntomas. Cada síntoma individual puede ocurrir con menos frecuencia que 1 de cada 10 personas. El Parkinsonismo incluye: aumento en la secreción de saliva o boca muy húmeda, rigidez musculoesquelética, babear, dolor cuando se doblan las
extremidades, movimientos del cuerpo más lentos, reducidos o difíciles, falta de expresión en la cara, tirantez musculares, tortícolis, rigidez muscular al andar, pasos cortos y rápidos, arrastrando los pies, y
ausencia de movimientos normales de los brazos, parpadeo persistente como respuesta a golpecitos de la frente (un reflejo anormal).
• Dolor de cabeza, dificultad para quedarse o permanecer dormido.
Frecuentes (afectan a entre 1 y 10 de cada 100 personas):
• Modorra, fatiga, cansancio, incapacidad para permanecer tranquilo, irritabilidad, ansiedad, somnolencia, mareo, problemas de atención, sensación de agotamiento, alteración del sueño, temblor.
• Vómitos, diarrea, estreñimiento, náuseas, aumento del apetito, dolor o malestar abdominal, dolor de garganta, sequedad de boca.
• Aumento de peso, aumento de la temperatura corporal, disminución del apetito.
• Dificultad respiratoria, infección pulmonar (neumonía), gripe, infección de las vías respiratorias, visión borrosa, congestión nasal, hemorragia nasal, tos.
• Infección del tracto urinario, orinar en la cama.
• Calambres musculares, movimientos involuntarios de la cara o los brazos y piernas, dolor en las articulaciones, dolor de espalda, hinchazón de brazos y piernas, dolor en brazos y piernas.
• Erupción, enrojecimiento de la piel.
• Latido rápido del corazón, dolor en el pecho.
• Aumento de la concentración de la hormona prolactina en la sangre.
Poco frecuentes (afectan a entre 1 y 10 de cada 1000 personas):
• Consumo excesivo de agua, incontinencia fecal, sed, heces muy duras, ronquera o trastorno de la voz.
• Infección pulmonar provocada por paso de alimentos a las vías respiratorias, infección de la vejiga, enrojecimiento de los ojos, sinusitis, infección vírica, infección del oído, infección de las amígdalas,
infección bajo la piel, infección de los ojos, infección de estómago, secreción ocular, infección de las uñas por hongos.
• Anomalía en la conducción eléctrica del corazón, bajada de la tensión arterial al ponerse de pie, disminución de la tensión arterial, sensación de mareo cuando cambia de posición, anomalía de la
actividad eléctrica del corazón (ECG), ritmo anormal del corazón, sentir los latidos del corazón, latido rápido o lento del corazón.
• Incontinencia urinaria, dolor al orinar, orinar con frecuencia.
• Confusión, trastorno de la atención, bajo nivel de conciencia, sueño excesivo, nerviosismo, estado de ánimo exaltado (manía), falta de energía e interés.
• Aumento de la glucosa en sangre, aumento de las enzimas hepáticas, disminución del número de
glóbulos blancos, disminución de la hemoglobina o del número de glóbulos rojos (anemia), aumento del número de eosinófilos (glóbulos blancos especiales), aumento de la creatina fosfoquinasa, disminución
del número de plaquetas (células de la sangre que ayudan a detener las hemorragias).
• Debilidad muscular, dolor muscular, dolor del oído, dolor de cuello, hinchazón de las articulaciones,
postura anómala, rigidez de las articulaciones, dolor de los músculos y huesos del pecho, malestar de pecho.
• Lesión de la piel, trastorno de la piel, sequedad de la piel, picor intenso, acné, pérdida de pelo
inflamación de la piel por ácaros, decoloración de la piel, engrosamiento de la piel, sonrojo, reducción de la sensibilidad de la piel al dolor o al tacto, inflamación grasienta de piel.
• Ausencia de menstruación, disfunción sexual, disfunción eréctil, trastorno de la eyaculación, secreción por las mamas, aumento de tamaño de las mamas en varones, disminución del deseo sexual, menstruación irregular, secreción vaginal.
• Desvanecimiento, trastorno de la marcha, inactividad, reducción del apetito con malnutrición y pérdida de peso, sensación de “indisposición”, trastorno del equilibrio, alergia, edema, trastorno del habla, escalofríos, anomalía de la coordinación.
• Hipersensibilidad dolorosa a la luz, aumento del flujo sanguíneo al ojo, hinchazón de ojos, sequedad de ojos, aumento del lagrimeo.
• Trastorno de las vías respiratorias, congestión pulmonar, ruidos crepitantes de los pulmones, congestión de las vías respiratorias, problemas para hablar, dificultad para tragar, tos con esputo, sonido ronco o silbante al respirar, enfermedad pseudogripal, sinusitis.
• Ausencia de respuesta a los estímulos, pérdida de conciencia, hinchazón repentina de labios y ojos con dificultad respiratoria, debilidad o entumecimiento repentinos de cara, brazos o piernas, especialmente en
un lado, o casos de habla confusa que duran menos de 24 horas (se denominan mini-ataque cerebral o ataque cerebral), movimientos involuntarios de cara, brazos o piernas, pitidos en los oídos, edema facial.
Raros (afectan a entre 1 y 10 de cada 10.000 personas):
• Incapacidad de alcanzar el orgasmo, trastorno menstrual.
• Caspa.
• Alergia a fármacos, frialdad en brazos y piernas, hinchazón de los labios, inflamación de los labios.
• Glaucoma, disminución de la agudeza visual, formación de costras en el borde del párpado, movimiento ocular.
• Ausencia de emociones.
• Alteración de la conciencia con aumento de la temperatura corporal y espasmos musculares, edema por todo el cuerpo, síndrome de retirada de medicamentos, disminución de la temperatura corporal.
• Respiración rápida y superficial, problemas respiratorios durante el sueño. Otitis media crónica.
• Obstrucción intestinal.
• Disminución del flujo de sangre al cerebro.
• Disminución del número de glóbulos blancos, secreción inadecuada de una hormona que controla el volumen de orina.
• Rotura de fibras musculares y dolor muscular (rabdomiolisis), trastorno del movimiento.
• Coma por diabetes no controlada.
• Color amarillo de la piel y los ojos (ictericia).
• Inflamación del páncreas.
Muy raros (afectan a menos de 1 de cada 10.000 personas):
• Complicaciones de la diabetes no controlada, con peligro para la vida.
Frecuencia desconocida de los efectos adversos (la frecuencia no puede estimarse a partir de los datos disponibles)
• Reacción alérgica grave que da lugar a dificultad respiratoria y shock.
• Ausencia de granulocitos (un tipo de células blancas que ayudan a combatir las infecciones).
• Erección prolongada y dolorosa.
• Ingesta de agua peligrosamente excesiva.
Risperidona inyectable de larga duración:
Se han notificado los siguientes efectos adversos con el uso de una inyección de larga duración de risperidona. Si experimenta alguno de los siguientes efectos hable con su médico, aunque no reciba tratamiento con inyecciones de larga duración de risperidona:
• Infección de intestino.
• Absceso bajo la piel, hormigueo, pinchazos o entumecimiento de la piel, inflamación de la piel.
• Disminución del número de glóbulos blancos, células que le ayudan a protegerse de las infecciones bacterianas.
• Depresión.
• Convulsiones.
• Guiños oculares.
• Sensación de giro u oscilación.
• Latido lento del corazón, aumento de la tensión arterial.
• Dolor de muelas, espasmo de la lengua.
• Dolor de nalgas.
• Disminución de peso.
Si considera que alguno de los efectos secundarios que sufre es grave o si aprecia cualquier efecto secundario no mencionado en éste prospecto, informe a su médico o farmacéutico.
Fuente: prospecto del medicamento proporcionado por el centro de información de medicamentos de la AEMPS.