Este es sólo un desahogo más entre los muchos que aparecen cada día en este foro. La verdad que yo antes había puesto uno, uno en el que ocupé toda la capacidad permitida por el foro para enviar un mensaje, y por supuesto, nadie lo leyó, y de las tres personas que lo hicieron, una me vapuleó literalmente... los resentidos nunca faltan. A pesar de que aquí poco incluyo cómo afecta mi fobia social mi vida, tengo ganas de soltar todo esto.
Ya me sentía muy mal desde ayer, pero esta mañana todo empeoró cuando entré a youtube y apareció en la parte superior el enlace al trailer de la película "Planeta de los Simios: (R)evolución". Yo ni sabía que habían hecho esta nueva película, con eso de que vivo totalmente apartado de lo que ocurre en el mundo.
El caso es que al ver el trailer recordé quién era yo cuando me encontraba en la secundaria y preparatoria, porque ver escenas así, de otras especies luchando contra la humanidad, siempre me encendía los ánimos, porque ya para entonces yo no me consideraba humano. Solían llamarme "monstruo", por no tener amigos, pero yo me adapté a ese apodo dándole otra connotación. Si querían que fuera un monstruo, lo sería... El único inconveniente es que, jamás tuve el valor, y lo único que logré fue caer en un ridículo cada vez más y más grande. Como me he dicho tantas veces en años recientes: "Los ataques a medias no sirven; si se planea atacar, tiene que ser sabiendo que se va a ganar". Tal vez por esto es que desde hace mucho que ya perdí la capacidad de enojarme, porque nunca he podido arreglar una situación que me sea adversa que me hiciera enojar, y no es que calmado pueda hacerlo; es sólo que el enojo me daba más valor, pero a todas luces aun así era insuficiente. Los miedos siempre fueron más poderosos.
Pero los tiempos cambian... He dicho precisamente que ya he perdido la capacidad de enojarme, así como la capacidad de sentir tantas otras cosas. Ya antes he comentado aquí que tengo anhedonia, tal vez en un grado apenas menor del que creía, pero la tengo. Y aplanamiento afectivo también... Ni siquiera por mis gatos siento el cariño que sentí hace años, cuando daba todo por defenderlos siendo el cobarde que soy y que era.
No fue la temática del trailer de la película que vi esta mañana lo que me puso mal. Como dije, hace unos 13 años más o menos, de haber visto escenas como esta, me hubiera sentido tan identificado con los simios rebelándose contra la maldita humanidad que tanto daño les ha hecho, igual que a mí, que me hubiera sentido con deseos de matar a mis acosadores... como casi cada noche de todos los días durante por lo menos 5 años.
Hace años que incluso perdí ese odio tan grande que sentía por la humanidad, y no es que ahora sea un filántropo: nada más alejado de eso. Sigo siendo misántropo, pero desde hace dos años que perdí por completo la coraza que me había hecho en la adolescencia y que al llegar a la adultez comenzó a diluirse poco a poco. La debilidad comenzó a entrar en mí, lo último que alguien como yo necesitaba. Un sentimentalismo sin sentido, sin futuro.
Mirando el trailer, más allá de las escenas de chimpancés encerrados en jaulas, de humanos maltratándolos o de todos los simios en rebelión corriendo por las autopistas causando el caos a quienes fueran sus verdugos, un solo segundo de trailer que nada tiene que ver con todo esto fue el que me dio el tiro de gracia. Lo mismo pasó con el trailer de Linterna Verde, y así con muchos otros más. Desde el año pasado que ya no me es posible leer, mirar programas, ahora ya ni siquiera avances de películas porque me pongo mal por estupideces.
La lealtad no sirve de nada, como le comentaba a una persona hace poco, y es que yo he sido incondicionalmente leal a terceros durante los últimos 17 años, bastante más de la mitad de mi vida. Hace no mucho a alguien más le dije que tengo "responsabilidades" que me atan de una manera que nadie tendría idea, y esa persona me respondió que "todos las tenemos". Lo cierto es que por lo menos dos personas aquí saben a la perfección (porque primero escuchan, luego juzgan, no como otras) de qué tamaño es la carga que llevo a cuestas, y aqui está:
Para comprenderla, ante todo, deberían partir de la siguiente identidad: para mí, el usuario ultimatum, los animales siempre han sido mis iguales. Partiendo de esto se infiere que los veo con exactamente los mismos derechos que yo y que ustedes, y por lo tanto, me he preocupado tanto por ellos como si fuesen mi familia. Hablo en particular de mis gatos, mi familia, la familia que nunca me gritoneó ni me amenazó a cada rato con echarme de la casa siendo niño porque les estorbaba.
Sin embargo, tan débil sentimental que siempre fui, tuve el atrevimiento de permitirme cuidar a otros 200 gatos (más o menos) que ni siquiera son míos. No viven conmigo por supuesto, sino que son libres... libres hasta donde los malditos humanos les llegan a permitir. Y no debí hacerlo, puesto que soy un cobarde, sin estudios, sin trabajo formal que no tiene ni en qué caer muerto, que no tiene un lugar propio donde vivir, y ahora, desde hace años, me he venido sintiendo responsable por más de 250 gatos... y como decía, ser leal a ellos (partiendo de nuevo de que los he considerado mis iguales) no es algo que la inmensa mayoría de la gente aprecie. Y para colmo, si tratar con los humanos para quienes lo que hago es una tontería, para quienes los animales no son nada, es terriblemente más desgastante, triste y doloroso tener que tratar con quienes dicen admirar todo esto pero que por detrás le clavan a uno un cuchillo, quienes ni siquiera se ponen a pensar el extremo sufrimiento de tener que ver morir a deceneas de gatos al año, verlos nacer y morir enseguida, verlos morir agonizando sea por enfermedad o sea porque los malditos humanos los envenenan o, como en el presente momento, los descalabran... sí, puesto que en estos momentos tengo hospitalizada a una gatita de un mes de edad a quien azotaron contra el suelo fisurándole el cráneo... de milagro está viva, pero habrá que ver si queda bien... Decía, quienes dicen admirar todo esto, pero que no se ponen en los zapatos de uno y respingan porque algo en mi labor "no les pareció".
Para quienes quieran criticar mi "lealtad" a seres que no son "humanos"... pueden ahorrarse su pútrido aliento... No me tomaré la molestia de escuchar... Todavía tengo muchísimo más que soltar; mi desahogo apenas comienza aquí. Como dije alguna vez, en mis dos años de miembro de este foro nunca me presenté... es hora de hacerlo.