El otro día leí esto:
“La influencia de la adversidad en la aparición de la depresión era significativamente mayor para aquellos que heredaron de ambos padres, en el cromosoma 17, una versión corta del gen transportador de la serotonina (conocido como 5-HTTLPR).
La diferencia de longitud está en una parte del gen llamada “secuencia de activación” que controla cuánta proteína se produce. Alrededor de una quinta parte de la población, como resultado de tener una versión más corta, produce menos cantidad de proteína responsable de transportar la serotonina, que desempeña un papel clave en la regulación del humor y del dolor, del apetito y del sueño, y es afectada por el Prozac. Tienen un 80% de probabilidad de tener depresiones clínicas si experimentan tres o cuatro situaciones negativas en cinco años.
Otros muchos estudios han vinculado la versión corta del gen con rasgos de personalidad relacionados con la ansiedad, incluidos comportamientos para evitar el peligro, rasgos neuróticos y experimentación con drogas ilegales.
Aquellos con una versión larga que les daba una “resistencia genética” contra la depresión tenían solo un 30% de probabilidades de desarrollar una enfermedad mental ante circunstancias similares.
El resto -aproximadamente la mitad de toda la gente- tiene una mezcla de los dos genotipos.”
Lo que me asustó de todo esto fue el 80% de probabilidad de tener depresión si te han tocado los dos “genes cortos”. Yo veo muy pero que muy fácil pasar por solo tres o cuatro situaciones negativas en cinco años, sobretodo porque aunque algo no sea realmente malo yo misma lo convierto rápidamente en una catástrofe.
Vas a terapia y te dicen cómo puedes trabajar para salir adelante, poder intentar estar bien, y tu te lo crees. Se pueden modificar los pensamientos, de acuerdo, pero no los genes (todavía). Si has tenido la mala suerte y tu cuerpo no puede hacer llegar la serotonina a su sitio, por más que te empeñes en ser positivo no te va a servir de nada comerte el coco.
Entonces qué te queda para evitar la depresión? Simplemente cruzar los dedos y esperar a que no te hayan tocado unos genes malos?
Pues vaya...
