Hola amigos, llevo días comiéndome la cabeza con una tontería, y supongo que necesito echarlo fuera. Verán, en octubre es mi cumpleaños, y es un día que temo muchísimo. Sé que debería ser lo contrario, que debería ser un día feliz, una celebración en toda regla, vamos. Pero me amarga muchísimo. Cuando llega mi cumpleaños llegan también incontables "dedos en la llaga", por parte de mi familia, desde los "¿por qué no llamas a tus amigos y lo celebras como dios manda?" o "si no te gustase tanto estar encerrado podríamos haber ido a asar carne a algún parquito, con todas tus amistades y la familia, con sus globos su tarta y todo".
Supongo que lo harán para motivarme, para sacarme de mis escondite y empujarme a llevar una vida más normal, pero todos esos comentarios lo que hacen es grabarme a fuego en la piel que estoy más solo que la una, que no tengo vida social, que soy un desgraciado, etc.
Sé que no tengo que estar amargándome con algo que pasará dentro de meses, y que probablemente lo que espero no será tan malo como lo que llegue, pero como dije, llevo días hecho polvo. Estupideces mías.
Bueno, me gustaría saber si os pasa lo mismo en vuestros cumpleaños, o si tenéis algún truco para no sentiros tan desgraciados, o si soy yo el único que se destroza el cerebro con éstas mamarrachadas.
Un saludo