No rotundo. No me gusta nada contar a la gente y sobre todo a gente "normal" mis problemas para relacionarme con la gente. Ya me cuesta contarselo a un profesional cuanto mas a alguien, que puede mostrar una actitud intolerante del estilo: son manias tuyas, o eres tonto, o reirse de ti o mirarte como un bicho raro o cualquier lindeza de ese calibre.
|