He tenido una de esas experiencias que me hacen sentir fatal. El caso es que me estoy preparando para un examen de inglés y voy a unas clases particulares con una nativa. No me voy a extender demasiado en detalles (escribo desde un ciber
), la cuestión es que me puse tan nervioso porque no recordaba la traducción de las palabras así que me entró la risa floja. Como sabrán es imposible controlar cuando te ocurre y no puedes detenerla. La profesora (para colmo sin saber ni papa de español) me miraba como si estuviera chiflado
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Los nervios me traicionaron, no es la primera vez ni será la última. También era previsible mi declive posterior. No acertaba ni a preguntar cuánto había que pagar. Solamente de pensar que me quedan cinco días para la evaluación (es en oral) y que me vuelva a ocurrir me produce una ansiedad tremenda, ahora mismo estoy sudando con algo de rubor. ¡Es increíble! Casi treinta y con este comportamiento infantil. Horrible
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