Hola, me pareció muy interesante el video que pusiste y tu planteamiento.
Con respecto a lo que dice sobre no buscar un sentido global sino sólo en las pequeñas cosas placenteras hasta un punto reconozco que parece razonable, pero también me pregunto hasta qué punto se puede vivir solamente de esos placeres, cuando no se pueden encontrar placeres, cuando todo parece derrumbarse, cuando uno no se siente tan fuerte. Y aunque podamos disfrutar de esos placeres por más que no duren mucho, ¿cuando se acaban qué? ¿Y cuando vienen las dificultades grandes de la vida en la que disfrutar de placeres no es posible?me parece que llega un momento en que necesitamos un sentido global y esos pequeños placeres ya no alcanzan para querer seguir viviendo.
Cuando se cree en algo más que en sólo lo inmediato y temporal, la visión se amplia y se encuentran muchos más recursos para mantenerse sin caerse y para ser felíz, ya no hay límites. Yo así lo experimenté y también llega un momento en que cuando ya disfruté de las cosas temporales algo como que me dice ¿y ahora qué? ¿y qué más? ¿esto es todo? no puede ser.
Para responder a tu pregunta mi respuesta es ésta:
El sentido de mi vida es hacer contento a Papá Dios
(eso intento, después que me salga siempre bien es otra cosa :P pero por ese camino voy) Un abrazo