Hola, poseedor de los títulos honoríficos al miembro más misterioso de los foros fóbicosociales y al nick más largo
Si dije eso fue en el contexto en el que nos encontramos: el de la fealdad y la dismorfofobia. Citas una parte de mi mensaje, pero era un todo, en consonancia con lo que él mencionó, justificándose en su experiencia, de que la fealdad destroza la vida.
Con esto quiero decir que, ¿de qué sirve que te hayan metido en la cabeza que tienes que desear algo que nunca tendrás? Está bien anhelar ir al espacio; es algo romántico y no afecta al proyecto de vida de uno. Pero anhelar un tipo de cuerpo o un nivel de belleza que nunca tendrás te afecta sexual y sentimentalmente, normalmente convirtiéndote en alguien enfermo, a no ser que poseas una personalidad muy consolidada o este sufrimiento forme parte de tu forma de vida (como ocurre con los artistas y las musas).
Lo que yo vengo a decir es que es importante que cada uno sea consciente de quién es, de sus virtudes y de sus limitaciones. Si eres feo, supéralo, no te quedes encallado y hagas que tu vida gire alrededor de tu defecto. ¿Encorajarías a un paraplégico a que siguiera añorando siempre poder volver a andar, haciendo así de su vida un camino de amargura y depresión? No creo que nadie respondiera que sí; se puede soñar con ello, pero los sueños sueños son, y no podemos quedarnos atascados ahí. El tema que nos incumbe es igual, con la variante de que la fealdad o el atractivo es un tema más subjetivo -no un intangible- y, por eso, se tiende a seguir esperando aquél boleto de lotería ganador que esa subjetividad encoraja a esperar plácidamente. Muy excepcionalmente llega.
Que nuestros deseos vengan del exterior, que nos los hayan metido en la cabeza, es algo triste. Alguien feo soñando con chicas de anuncio, está destinado al sufrimiento ¿Por qué no sabe olvidarse de eso para pasar a descubrir lo que sí está a se alcance? ¿Por qué no sabe dejar la fantasía en el lugar que le pertoca, en lugar de dejar que ésta le invada? ¿Quién le ha metido en la cabeza que por ser feos no va a poder disfrutar del sexo, o enamorarse de alguien? La mayoría de parejas -más o menos estables y adultas- que se ven por la calle, o sea, la gran mayoría de la población, son gente del montón, sin atractivo especial o alguno, pero gente parecida que deciden compartir su sexualidad para así poderse olvidarse de esa obligación humana y emprender un proyecto de vida juntos. Ya tropezarán de nuevo en el futuro, es lo más seguro, pero me sigue pareciendo mejor ese placer que no el de quedarse en casa haciéndose pajas.
Por más inri, también todo eso tiene la contrapartida de que el que se conforma con relacionarse con lo que está a su nivel es tachado, automáticamente y como se me hizo a mí mismo en este hilo, de desaliñado y conformista.
En cuanto a la educación, y para explicarme más claramente, de alguna manera podríamos citar aquella frase de Einstein: ¿Que sabe el pez del agua en la que lleva nadando toda su vida? En el caso del que nunca ha estado con nadie, ¿por qué esa persona pone por encima la prioridad de poseer la promesa que es la belleza -que le han inducido- a disfrutar de los placeres físicos que podría tener con alguien más semejante a él -algo que podría descubrir él mismo-?
Con el tema de la educación de los sentidos (en el caso de la belleza, normalmente nos quedamos en la fase preliminar de la vista), siempre es lo mismo: los sentidos se educan y se entrenan. ¿A quién le gustó el primer cigarro? ¿Y la primera cerveza? Los de ciudad encuentran desagradable la olor a estiércol del campo, pero el payés la encuentra de lo más normal ¿Imaginas un payés tan caprichoso que odiase el olor del campo? ¡Qué estupidez por su parte! A mí de pequeño no me gustaba el pimiento, y ahora es fácilmente mi verdura favorita ¿Por qué? Porque un día me atreví a probarlo y vi que el placer del gusto podía sobrepasar el miedo que mi vista -el más tiránico de los sentidos- había construido. Lo mismo pasa, pues, con el que se queda lamentándose de lo que no tendrá, en lugar de aprender a disfrutar de lo que sus limitaciones le permiten; del que se olvida o no quiere admitir quién es para seguir deseando lo ajeno.
Con eso quiero responder a tu pregunta que me hiciste sobre la
educación, que se explica con todo lo que he dicho previamente: si uno está encallado en su complejo, no avanza ni aprende. Y a mí, haberse declarado (muy) feo, y al mismo tiempo escoger, de todas esas chicas, la más lolita, me suena a no saber ni de qué se habla. Y sí, seguramente será el deseo más puro de todos -siempre deseamos lo imposible, lo que no tenemos. "The unattainable is invariable attractive", dice uno de los
truismos de Jenny Holzer"-, pero no por eso tenemos que darle pie y permitir que un deseo tan simple nos condemne una vida de sufrimiento (o sí, después lo mencionaré).
De la misma forma que con la comida, el que, quedándose atascado en el enamoramiento visual, no prueba nunca, no sabe lo que se pierde. Por eso mencioné, por ejemplo, la voluptuosidad, o sea "lo que incita al placer". Uno no puede saber qué es la voluptuosidad, sino sabe lo que es el placer. Te pasas la vida enamorado de una imagen de lolita para que, una vez poseída y disfrutada, encuentres en falta un buen culo o unas buenas tetas. ¿Te has fijado nunca en las diferencias de gustos que se tienen aquí y en los países latinos, respecto a las medidas de los atributos femeninos? Casi todas las chicas de la foto son guapas, pero aquí, occidentalizados, nos quedamos con el sueño de juventud que es la primera. Quizá deberíamos aprender un poco de ellos, recuperar -recordar- qué es aquello para lo que estamos hechos, y no aquello por lo que nos han convencido ¿Qué fue de expresiones como
maciza? ¿No os habéis fijado nunca que los gustos en mujeres de los que sí follan son siempre distintos de los que nunca lo hacen? ¡Como abunda el engaño sobre lo que es bueno y lo que no!
Y ojo, aún con todo esto, a mí me parece fantástico el comportamiento romántico o autodestructivo. Cada uno que haga lo que quiera. Pero hay que decir que no todos llegarán a escribir como Bukowski (que estos días se ha mencionado por aquí), ni sabrán componer Creep como Thom Yorke, o fundar una banda como Hefner, alguien tan feo como Darren Hayman; la mayoría no pasaran del patético llorar porque son feos y porque no van a poder levantarse nunca al lado de
un culo como este. El ser inteligente sabe clasificar esto en sueño y fantasía, quitárselo de su cuerpo y ponerlo en un cajón, en una canción, o en un cuadro; el que no lo es, sufre por este anhelo el resto de su vida.
O esa es mi opinión, vamos.
Por cierto, aprovecho para añadir un link a la wikipedia más serio sobre la misma temática que esa imagen de tipologías de cuerpos femeninos:
http://en.wikipedia.org/wiki/Female_body_shape.