Si a alguien le sirve de consuelo...
Sobre la felicidad en relación al nivel económico se ha estudiado mucho en diferentes épocas y culturas, y siempre se llega más o menos a la misma conclusión, que el dinero sólo influye en la felicidad cuando estamos por debajo del umbral de la pobreza.
Dificilmente una madre que no puede alimentar a sus hijos puede ser feliz, por poner un ejemplo.
La felicidad es un estado emocional y como tal cambia, queramos o no, siempre y cuando tengamos las necesidades más básicas cubiertas, de ahí hasta los miles y miles de millones que queramos imaginar en nuestra cuenta la felicidad se mantiene inalterable (teniendo sólo en cuenta el factor económico).
Siempre pienso en el ejemplo de cuando nos sacamos el carnet y compramos nuestro primer "4 latas" y nuestra felicidad no sería inferior a la del sultan de Brunei cuando se compra 4 coches de 1 millon de euros para su colección.
Es más, la gente adinerada suele dar peores resultados de felicidad en las encuenstas.
Una vez vi en el programa de redes un curioso experimento demostrado con distintos ejemplos donde se comprobaba que cuando teníamos más opciones para elegir, siempre nos mostrábamos más arrepentidos o inseguros con la elección que cuando habían pocas opciones o sólo una.
Aunque yo tengo otra teoría más, creo que muchas de las ilusiones en la vida son lo que nos mantienen mentalmente en forma, activos, hablo de ilusiones, motivaciones, objetivos... y cuando usamos el dinero para materializar todos esos deseos nos cargamos la ilusión de golpe.
¿quien no ha deseado de pequeño un juguete durante meses en la publicidad prenavideña y cuando se lo han regalado se ha cansado de el en 10 minutos? el dinero se carga ilusiones, el camino hacia la meta, y es todavía más frustrante comprobar que la relación dinero-felicidad que nos han inculcado que es proporcional es totalmente falsa e incluso que actua en el sentido contrario, siempre y cuando tengamos las necesidades básicas cubiertas como decía al principio.
La verdad es que nunca he convencido a nadie explicando esto pero yo estoy tan convencido de haberlo entendido que puedo decir con absoluta sinceridad que me da completamente igual que me toque la loteria, y no es porque sea rico precisamente.
De hecho desde hace muchos años no me he vuelto a gastar ni un solo euro en loterias, porque entiendo que cada euro gastado me acerca a ese umbral de la pobreza donde el dinero si afecta a la felicidad pero de ahí para arriba o es inútil o incluso contraproducente.
Para mi sólo es útil para tener la seguridad o tranquilidad de no tener que necesitarlo.